Castilleja de la Cuesta

Aparca dos años con una tarjeta de movilidad reducida que encontró en el suelo

La tarjeta pertenecía a una persona que la había perdido en 2017, mientras que otra persona usaba desde 2016 una comprada en un mercadillo

08 oct 2019 / 08:06 h - Actualizado: 08 oct 2019 / 08:36 h.
"Turismo","Movilidad","Seguridad vial","Policía Local","Discapacidad"
  • La tarjeta intervenida. / El Correo
    La tarjeta intervenida. / El Correo

Simplemente por tener facilidades a la hora de aparcar, dos vecinos de Sevilla se enfrentan a un presunto delito de falsedad documental, tras usar de forma fraudulenta tarjetas de aparcamiento para personas con movilidad reducida. Una de ellas la usó durante dos años. Tenía una tarjeta que encontró casualmente en la calle, y decidió usar en su propio beneficio.

Todo es fruto de una campaña iniciada a principios del pasado mes de septiembre por la Policía de este municipio sevillano, para desarrollar un trabajo especial de control y vigilancia de las zonas de estacionamiento destinadas a las personas que sí necesitan las plazas específicas para aparcar, concretamente comprobando que se haga un uso correcto de las mismas mediante las tarjetas de estacionamiento.

Fruto de ello es el hecho de haber detectado que dos personas hacían un uso antirreglamentario de estos documentos públicos, y por los que han sido investigadas por un presunto delito contra la seguridad vial.

Ocultaba la fecha de caducidad

Uno de ellos, el citado, llama poderosamente la atención, ya que, de manera minuciosa y hábil, tenía colocada en el salpicadero la tarjeta para ocultar su fecha de caducidad, lo que no pasó desapercibido para los agentes.

Así, tras ser retirado el coche con la grúa municipal y personarse su titular en el depósito municipal, se constató que el documento tenía la vigencia vencida desde el año 2017, no poseía movilidad reducida ni pudo demostrar relación alguna con el titular del documento.

Ante estos indicios claros de un posible delito de falsedad documental basado en el uso ilegítimo de un documento original, la Policía Local de Castilleja de la Cuesta elevó una consulta a los órganos competentes de la Junta de Andalucía, comprobando que el documento pertenecía a una personas son relación alguna con el titular del vehículo retirado. Fue entonces cuando esta persona reconoció haber utilizado indebidamente el documento tras haberlo encontrado en la vía pública.

En otro de los casos, los policías pudieron observar cómo la tarjeta de estacionamiento estaba colocada con intención de ocultar su fecha, pues ésta estaba vencida desde el año 2015 según se pudo comprobar cuando el turismo fue retirado con grúa municipal.

La compró en un mercadillo

Posteriormente, tras personarse el titular del vehículo y tener ya en las manos la tarjeta, se constató que ésta incluso había sido manipulada en sus elementos esenciales de cumplimentación. Así las cosas, tras consulta a la Dirección General de Personas con Discapacidad e Inclusión, dependiente de la Junta de Andalucía, se comprobó que el titular real del documento había fallecido en el año 2016, por lo que el documento no solo había sido manipulado sino que también se hacía uso de éste habiéndose producido el fallecimiento de su titular.

Tras ello, la persona que hacía uso ilegítimo de la tarjeta confesó haberla comprado en un mercadillo de Sevilla, dándose la circunstancia que esta persona era de hecho una persona con movilidad reducida que carecía de documento para estacionar en zona habilitada para personas como ella.

Así pues, ambos usos fraudulentos de los documentos fueron puestos en conocimiento de los juzgados de Sevilla, investigándose a estas personas por presuntos delitos de falsedad documental. Las dos se enfrentan a penas de prisión y multa penal.