-
Las aceitunas salen desparramadas del coche. / El Correo
La placidez del domingo por la mañana en Pilas se vio sacudida con fuerza: un Seat Toledo azul marino, con matrícula de Ciudad Real y los cristales tintados, impactó con los veladores –afortunadamente vacíos– de un bar frente al parque.
Eran las ocho de la mañana y del vehículo salió huyendo un individuo mientras se desparramaban por el suelo miles de aceitunas.
Una portavoz del Ayuntamiento explicó los datos que maneja la Policía Local: en el coche había un segundo ocupante, quien tuvo que ser atendido en un centro sanitario debido a las heridas del impacto. Las aceitunas resultaron pesar nada menos que una tonelada. Un agricultor de Almonte (Huelva), a algo más de 20 kilómetros del lugar del accidente, denunció poco después del accidente la sustracción de mil kilos de aceitunas de su campo.
Los dos ocupantes, que fueron detenidos y posteriormente puestos en libertad, son vecinos de otra localidad del Aljarafe y tienen pasaporte rumano.
El vehículo y las aceitunas, prosigue el Ayuntamiento, están a disposición judicial. El magistrado determinará la gravedad de los hechos y el relato exacto de lo sucedido.
De momento hay dos hipótesis sobre las causas del accidente, que no provocó una desgracia porque el bar, situado en un extremo de la calle Santillán, aún no había abierto. La primera teoría señala que el vehículo callejeó a gran velocidad por el interior del casco urbano de Pilas para evitar alguna patrulla de la Guardia Civil en la circunvalación del pueblo.
La segunda hipótesis señala que los mil kilos de aceitunas se desparramaron por el interior del vehículo antes del impacto, con lo que el conductor no pudo controlar el pedal del freno.
En todo caso, el tema de conversación en Pilas todavía son los detalles de esta insólita manera de comenzar un domingo.