Es un misterio sobre el que muchos vecinos de la localidad de Valencina de la Concepción y usuarios de la estación se habían cuestionado en alguna ocasión. Resulta que, con más o menos frecuencia, cuando se accedía a sus instalaciones se podía ver un ejemplar de perdiz muerto en el suelo de esta estación.
Y la respuesta no podría ser más sencilla, a la par que fácil de solventar: sus cristales. Lo ha denunciado el profesor sevillano Enrique Herrero, conocido como 'Quique bolsitas', que recorre distintos espacios cada día intentando concienciar sobre la importancia del cuidado al medio ambiente.
Enrique recorre campos, pueblos y ciudades retirando plásticos y concienciando sobre las consecuencias del cambio climático si no se logra controlar la 'basuraleza', y ahora se ha encontrado con algo bastante llamativo, en la citada estación de Valencina.
El impacto contra los cristales
Al parecer, las aves mueren al impactar fuertemente con los cristales de la estación mientras intentan cruzar sin advertir la presencia del cristal, dada su trasparencia. Es tan fácil como que se golpean mortalmente cuando creen que no tienen ningún obstáculo por delante, y la solución es, por lo tanto, muy sencilla.
Por ello, ha pedido al Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) una solución al respecto, que parece que ni es problemática ni supone una gran inversión económica.
La fotografía que ha distribuido Enrique en sus redes sociales habla a las claras del problema que denuncia. Aparte de salvaguardar la vida de los animales, solventar este asunto puede evitar un problema de salud, teniendo en cuenta que no parece muy saludable que los cadáveres de las aves estén en la estación, sobre todo con las altas temperaturas de estos días en el Aljarafe sevillano.
El Plogging como forma de vida
Lo que hace ‘Quique bolsitas’ es más que recoger basura, es una forma de vida. El Plogging es la práctica que combina el ejercicio al aire libre con la recogida de residuos.
En otras palabras, se trata de aprovechar cualquier actividad física al aire libre para la recogida de los desperdicios que se encuentran en las playas, las montañas o las propias ciudades.
Esto ha permitido que deportes como el senderismo, el running, el kayak, el buceo, el paddle surf, el snorkel, el trail, la bici, el esquí y el parkour, comiencen a incluir a los primeros ploggers entre sus filas.
Se considera ideal para trabajar la intensidad, en lugar de recorrer grandes distancias. El movimiento de agacharse a recoger y volver a levantarse (sentadilla) es una buena forma de trabajar la tonificación de glúteos y piernas.
España es un lugar ideal para esta práctica deportiva-natural, teniendo en cuenta que unos 4 millones de personas practican senderismo de forma regular y un 33 % de la población sale a correr más de 3 días por semana.