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El proceso será largo y la competencia muy amplia, pero la confianza es que en el horizonte de tres años Itálica pueda ser Patrimonio Mundial por la Unesco. / Antonio Acedo -
Marcelino Sánchez, Rocío Sutil, Manuel del Valle y Carolina Casanova. / El Correo
Itálica sigue imparable su camino para conseguir ser declarada Patrimonio Mundial. Esta semana arranca la segunda fase del proyecto, cuyo objetivo central es la redacción del así llamado expediente de Valor Universal Excepcional que debe estar finalizado en agosto para que el conjunto arqueológico esté en 2019 en disposición de entrar en la lista indicativa de la Junta de Andalucía de bienes patrimoniales susceptibles de obtener la declaración por la Unesco.
Todas las personalidades que encabezan la iniciativa –aglutinadas por la organización civil Civisur– advirtieron ayer, en un acto en la Casa de la Provincia, que «el camino que queda por recorrer será largo y difícil». De un lado, hay que aguardar a que la Junta eleve la propuesta al Gobierno de España y este, a razón de un bien al año, planteará a la Unesco la posibilidad de que sea Itálica en un momento indeterminado. Además, y como explicó el director general de Bienes Culturales de la Junta, Marcelino Sánchez, «la Unesco tiende a priorizar países y continentes que tienen un número menor de declaraciones como Patrimonio Mundial, como es el caso, por ejemplo, de África».
El presidente de Civisur, Manuel del Valle, recordó cómo «hace 39 años debíamos en este salón [por la Casa de la Provincia] varios proyectos de expropiación de casas construidas sobre el teatro de Itálica. Ahora, a políticos y a sociedad civil le toca el defender este proyecto, porque a esta ciudad le parece que todo le es debido y no, las conquistas importantes hay que pelearlas», aseguró.
Todas las iniciativa que de ahora en adelante se activarán no buscarán otro empeño que el de arropar la presentación ante la Unesco. El margen de tiempo es amplio, bascula entre tres y cinco años. Por eso, Concha Cobreros, directora del consejo asesor de la candidatura y de la comisión de Cultura de Civisur, desgranó ayer los cuatro seminarios científicos, que comienzan hoy miércoles en el Paraninfo de la Universidad de Sevilla y cuyas conclusiones y memorias nutrirán el expediente de la candidatura que ha de estar formalmente presentada este verano.
El profesor y poeta Jacobo Cortines disertará esta tarde en el Paraninfo de la Hispalense sobre la huella literaria en Itálica. Además de la literatura, los seminarios se internarán en disciplinas la arqueología, la arquitectura y la historia. Están coordinados por el catedrático de literatura española de la Hispalense, Manuel Ángel Vázquez Medel; el catedrático de Arqueología de la Universidad de Sevilla, José Beltrán Fortes; el catedrático de la Universidad Pablo de Olavide (UPO), Juan Manuel Cortés Copete; y el arqueólogo y exdirector del conjunto arqueológico de Itálica, José Manuel Rodríguez Hidalgo. Todos ellos forman parte del consejo asesor de esta candidatura. Del último de ellos la Casa de la Provincia acogerá en otoño una exposición con fotografías y grabados sobre el yacimiento de Santiponce a lo largo de las décadas.
Precisamente la alcaldesa de la localidad, Carolina Casanova, lamentó que «Itálica tiene una importancia que no se le está dando», a la vez que reclamó «más seguridad y accesibilidad para el conjunto arqueológico». «Si esta candidatura prospera como va a hacerlo no es solo porque Itálica lo merezca por sí sola, es también porque estamos hablando del mayor motor de desarrollo y transformación social que se le puede dar a Santiponce», esbozó en clave municipal.
Civisur también tiene previsto activar una campaña de difusión en redes sociales y también en los colegios. Del mismo modo trabajan en conseguir una copia de la Loba Capitolina y en el hermanamiento de Itálica con la Villa Adriana. Una recogida de adhesiones al proyecto, al que se puede sumar toda aquella persona que lo estime oportuno, será también otra de las realidades de una fase que quiere llevar, «siempre desinteresadamente y por amor a Itálica», al yacimiento hacia la máxima consideración mundial dentro del patrimonio.