El Ayuntamiento de Utrera ha anunciado la adquisición de la antigua sinagoga judía de la ciudad, en la zona conocida como Niño Perdido. El acuerdo para la compra de este inmueble monumental, ubicado en pleno centro histórico de la ciudad, junto con otros tres más pertenecientes a la familia González de la Peña, lo formalizará hoy el Consistorio en la junta local de gobierno, donde el acuerdo, previsiblemente, resultará aprobado y donde se ofrecerán todos los detalles que rodean esta operación.

La adquisición del inmueble es un paso más en el proyecto de recuperación de patrimonio histórico y de potenciación del turismo, dado que esta acción obligará al Ayuntamiento a la conservación y la puesta en valor de este bien de interés cultural.

El edificio monumental corresponde, según apuntan los historiadores, a los siglos finales de la Edad Media (s. XIV y XV), la Modernidad (s. XVI y XVII), e incorporaciones contemporáneas (s. XVIII-XX). Según las fuentes documentales consultadas, se encuentra ubicado en plena judería utrerana y todo parece indicar que fue sinagoga, posteriormente transformada en capilla y otras instalaciones del antiguo hospital de la Misericordia. Una vez realizada la compra y tras la necesaria restauración, el Gobierno municipal espera que el inmueble, cuyo último uso hace pocos años fue de bar de tapas y bar de copas, se convierta en un nuevo equipamiento cultural para la ciudad de índole museográfico, desde donde gestionen y programen actividades propias de la Delegación de Cultura. El acuerdo con la familia González de la Peña contempla pagos en metálico y con suelo municipal en varias fincas de las que el Consistorio utrerano es titular.

Además de la antigua sinagoga, el acuerdo contempla la adquisición de otras tres edificaciones propiedad de la mencionada familia, que se encuentran entre las calles Rodrigo Caro y Menéndez Pelayo y para las que se plantean otros usos relacionados con la cultura.