La Consejería de Agricultura libera un lince ibérico en Lora del Río

El ejemplar forma parte del programa Life ‘LynxConnect’ para la reproducción, diversidad genética y expansión de la especie en la Sierra Morena occidental

22 dic 2020 / 09:27 h - Actualizado: 22 dic 2020 / 09:29 h.
  • La consejera de Agricultura, Carmen Crespo, procedió a la liberación del lince ‘Ilusión’ en el término de Lora del Río (Foto: Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible).
    La consejera de Agricultura, Carmen Crespo, procedió a la liberación del lince ‘Ilusión’ en el término de Lora del Río (Foto: Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible).

El lince ‘Ilusión’ ya vive en las faldas de la Sierra Morena, tras su liberación en el término municipal de Lora del Río. Una apuesta de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible para la preservación de la especie, favoreciendo la creación de nuevos asentamientos, la conexión de poblaciones existentes y la renovación con nuevos individuos para fomentar la diversidad genética.

‘Ilusión’ fue capturado el pasado 25 de septiembre cuando corría desorientada por el núcleo urbano de Rociana del Condado (Huelva). El ejemplar fue trasladado al Centro de Recuperación de Especies Amenazada (CREA) – Centro de Gestión del Medio Marino Andaluz (Cegma) Marismas del Odiel (Huelva), donde ha permanecido hasta el pasado 18 de diciembre, cuando fue liberado en Lora del Río.

Proyecto para la conexión de poblaciones de linces que favorece la diversidad genética en la especie

Con esta liberación, que forma parte del proyecto Life ‘LynxConnect’, el lince participará en el programa de reproducción y expansión de la especie, lo que supone “una oportunidad para su traslocación” en la Sierra Morena occidental, según se han informado desde la Consejería de Agricultura. En este sentido, el proyecto Life ‘LynxConnect’, iniciado a principios de 2020, es la apuesta de la Junta de Andalucía para contribuir a la preservación de las especies, cuyo reto principal es la consecución de una población de lince ibérico autosostenible y que sea genéticamente viable.

Son objetivos de este proyecto la conexión de las distintas poblaciones que existen actualmente del lince ibérico, de modo que se favorezca la diversidad genética a través de la reproducción con individuos ajenos al grupo, previniéndose así la endogamia. Según explicó la consejera de Agricultura, Carmen Crespo, en el acto de liberación del animal, es necesario “crear pequeños asentamientos de linces en zonas de conexión que faciliten el intercambio de individuos y de genes entre las poblaciones ya existentes”.

La suelta del ejemplar capturado en Rociana del Condado coincide con el inicio del periodo de celo de la especie, lo que favorecerá que pueda encontrar rastros de la hembra territorial de la zona. En este sentido, ya se liberó hace unos años en esta misma zona una hembra, llamada ‘Ignota’, que no tiene posibilidad de reproducción al no existir machos adultos de lince ibérico en el territorio.

Lora del Río reúne las condiciones óptimas para la expansión de la especia en la Sierra Morena occidental

Mediante las medidas de gestión adecuadas, se facilita el proceso de colonización mediante ejemplares dispersantes procedentes de otras poblaciones, como ha sido este caso. A través de modelos de conectividad, calidad del hábitat y permeabilidad del paisaje, se establecen zonas de conexión entre poblaciones. Con ello, según se señala desde la Consejería “a veces se produce la expansión y colonización natural del lince ibérico hacia lugares estratégicos para la consecución de estos objetivos”. En este sentido, el entorno de Lora del Río “reúne condiciones óptimas de hábitat, tiene abundancia de presas y está ubicado en el pasillo de conexión que facilitará la expansión natural de la especie hacia Sierra Morena occidental”.

Según los datos ofrecidos por la Consejería de Agricultura, el último censo – correspondiente a 2019 – recoge un mínimo de 461 ejemplares distribuidos en una superficie de 1.774 kilómetros cuadrados entre las comarcas de Doñana-Aljarafe y Sierra Morena oriental. El crecimiento de esta población está favoreciendo la dispersión de ejemplares fuera del área considerada de presencia estable. Del mismo modo, se viene detectando la expansión de la especie hacia hábitats antes considerados inadecuados, como el núcleo Andújar/Cardeña. Igualmente, se vienen detectando casos puntuales de linces asentados en la Sierra Morena central y la campiña subbética de Jaén.