La frustrante estantería vacía

Hasta 209 medicamentos que deberían llegar a las farmacias no están disponibles. Las alternativas a veces no son fáciles y sale perdiendo el paciente

17 dic 2016 / 20:20 h - Actualizado: 17 dic 2016 / 20:20 h.
"Salud pública","Medicina","Chequeo a las farmacias"
  • Interior de la Sanafarmacia de Ciudad Expo, en Mairena del Aljarafe, el pasado fin de semana. / El Correo
    Interior de la Sanafarmacia de Ciudad Expo, en Mairena del Aljarafe, el pasado fin de semana. / El Correo
  • El ibuprofeno, uno de los medicamentos más consumidos. / Efe
    El ibuprofeno, uno de los medicamentos más consumidos. / Efe

Pocas cosas hay más frustrantes que acudir a una farmacia cuando te encuentras mal y volver de vacío, con tu malestar a cuestas, porque no está disponible la medicina.

Aunque personalmente no me había ocurrido nunca –salvo cuando me han pedido que vuelva por la tarde o a lo sumo al día siguiente–, en una rápida encuesta improvisada por Whatsapp entre 96 de mis contactos con quienes tengo la confianza suficiente me encontré con que más del 5% se habían topado con un problema serio de desabastecimiento farmacéutico.

Es más, otra encuesta a pie de calle, a la entrada de una farmacia de Mairena del Aljarafe, arrojó que el 10% de los usuarios se habían topado con el mismo problema, mientras que hasta un 30% se quejaban del suministro de genéricos en lugar de medicamentos de marca.

Lo que no me esperaba al hablar con los propios farmacéuticos es que confirmen que en un establecimiento cualquiera faltan siempre entre 30 y 100 productos, con una media de unos 60. Y si bien son relativamente pocos (60 medicamentos de un total de 15.000 es el 0,40%), a más de un paciente le hacen la faena, explica Luis Giráldez, responsable de Sanafarmacia en Ciudad Expo, un referente entre estos servicios en el Aljarafe.

¿Por qué faltan estos medicamentos de las estanterías (y de las reboticas, donde las farmacias guardan el 90% de sus referencias)?

El farmacéutico adjunto en ese mismo local, José Antonio Yerga, explica que los controles de calidad con los medicamentos son extremos: los análisis periódicos de la Agencia Española de Medicamentos o de su equivalente norteamericana (FDA) pueden sacar del mercado un lote por un defecto en uno de los componentes –o con menos frecuencia, retirar del mercado una marca por efectos secundarios graves–, pero también hay factores que dependen de los mercados y la globalización: problemas de los laboratorios para abastecerse de materia prima y retrasos en la cadena de intermediarios entre estos laboratorios y las farmacias (en Andalucía, fundamentalmente los proveedores Cecofar y Alliance Helathcare).

Las farmacias, ante esta situación, «podemos hacer muy poco: sustituir una medicina que no nos llega por una alternativa similar, pero no siempre es posible», indica Yerga. Precisamente ayer esta farmacia estaba sin el ibuprofeno genérico de la subasta de la Consejería de Salud, pero los clientes simplemente se llevaban el mismo medicamento de otro laboratorio.

Más problemático es el caso de Verónica Sánchez, vecina de Ciudad Expo quien suele acudir a esta farmacia mairenera a por ranitidina (un protector de estómago) para su madre. De vez en cuando, explica, «el laboratorio falla y no hay, y mi madre es intolerante a la lactosa y no es compatible con todos los medicamentos alternativos».

Pero su gran problema de desabastecimiento se llama Urbal, un medicamento que se dejó de fabricar hace un par de años. Cuando se acabaron los stocks de las farmacias su madre se quedó huérfana. El laboratorio Merck lo dejó de producir y recibió acusaciones de que lo abandonaba por su bajo precio.

En la farmacia Yerga explica que este medicamento cuyo principio activo es el sucralfato, regenera la mucosa gástrica y esofágica, no tiene un sustituto similar, sino alternativas que no son exactamente iguales. Un problema para los «pocos» pacientes a quienes se les prescribía.

Los desabastecimientos de cualquier son imprevisibles y pueden durar desde pocos días a meses. La Agencia Española del Medicamento mantiene una lista actualizada que se puede consultar en su portal web, y que ayer sumaba 209 medicinas que deberían estar en las farmacias, pero no llegan.

Una de las soluciones para estos cortes en el suministro es la importación de medicinas de otros países de la UE. En los últimos meses ha habido problemas con una vacuna para el meningococo, Bexero, que se ha traído de Portugal, explican en Sanafarmacia. Pero en algunos casos se han visto hasta medicamentos búlgaros, con su caja en las fascinantes letras cirílicas.