La joya ecológica de las lagunas de Utrera

Un estudio revela que este complejo endorreico es uno de los de mayor variedad de especies de Andalucía

17 jun 2018 / 22:57 h - Actualizado: 17 jun 2018 / 22:57 h.
"Medio ambiente","Paraísos naturales"
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La reserva natural del complejo endorreico de Utrera se está consolidando como uno de los humedales más importantes de Andalucía. Así lo avalan los últimos estudios y las propuestas que se están realizando para esta zona ecológica, como la creación de un observatorio de aves y un centro de interpretación que incluiría, no sólo el propio complejo endorreico, sino también otras zonas de interés ecológico del entorno como son el Pinar de Doña y el Alcornocal de Don Ismael, ambos también del término municipal de Utrera.

El complejo endorreico de Utrera es un humedal cercano al núcleo poblacional de El Palmar de Troya, que tiene una privilegiada situación entre las cordilleras Béticas y la depresión del Guadalquivir limitando con los terrenos de Las Marismas. Este enclave ecológico está formado por tres lagunas de interior de carácter estacional, Zarracatín, Arjona y Alcaparrosa, en las que su flora y fauna son una de sus principales riquezas, ya que, debido al carácter estacional y a la gran variabilidad del régimen de inundación de las lagunas, la presencia de su avifauna, aunque no es constante, sí es abundante, estando condicionada por el nivel de encharcamiento y la disponibilidad de macrófitos sumergidos, base alimenticia para la mayoría de las aves acuáticas.

En cuanto a la flora, el biólogo utrerano y miembro del Centro de Investigación y Desarrollo de Recursos Científicos Bioscripts, Eduardo Bazo Coronilla, ha realizado un estudio florístico del complejo endorreico de Utrera. El objetivo de este estudio ha sido, según explica, establecer un catálogo eficaz que permita a las diferentes administraciones y a los investigadores tener «una información útil y actualizada» que sirva de base a futuras investigaciones.

El catálogo de las plantas del complejo endorreico de Utrera que ha resultado de este estudio está compuesto por un total de 145 taxones, correspondientes a las divisiones Chlorophyta (algas verdes), Pteridophyta (helechos) y Spermatophyta (plantas con semilla), siendo este último el predominante. En esta vegetación predominan los juncos, eneas y carrizos.

A pesar de que el número de especies que componen el ecosistema endorreico de las tres lagunas de Utrera, que cuenta con una extensión cercana a las 600 hectáreas, pueda parecer escaso con 145 taxones, es similar al de la marisma de Odiel, que cuenta con 167 taxones para una extensión de terreno total mucho mayor de 7.185 hectáreas.

En cuanto a la fauna del complejo endorreico de Utrera pueden observarse, según Bazo, una mayor variedad de especies como son la amplia representación en las anátidas, como pato real, pato cuchara o cerceta común, y la focha común. Otras especies son la malvasía, el flamenco y el calamón.

Al margen de las aves, otras especies presentes en este entorno son anfibios como el sapo común, la rana, y el sapillo pintojo, además de mamíferos como conejo, liebre, comadreja y también tejón, gineta y zorro, entre otros animales.

El principal problema para la fauna, según el biólogo utrerano, estriba en la carretera que separa entre sí las tres lagunas y que suponen «un tapón para los desplazamientos», principalmente de anfibios y mamíferos.

Sin embargo, estas tres lagunas son un punto clave para la reproducción y descanso de numerosas aves acuáticas durante las migraciones y son un hábitat alternativo para las mismas teniendo en cuenta su cercanía con las marismas del Guadalquivir.

El propio Bazo, junto con un grupo de expertos en biología, lleva varios años promoviendo la creación de un centro de interpretación de aves en el complejo endorreico de Utrera con el fin de explotar su potencial medioambiental con fines ecológicos, educativos y turísticos. Dicho proyecto, que ya ha presentado a la Junta de Andalucía, incluye la instalación de un observatorio de aves y un centro de interpretación permanente con sala de exposiciones, sala de proyecciones y donde se puedan ofrecer conferencias, talleres y otras actividades relacionadas con el medio ambiente.