La Virgen María, en la advocación de Nuestra Señora de la Soledad, ha sido ratificada por la Santa Sede como Patrona Apud Deum de Cantillana. Se ha dado respuesta positiva a la petición que la hermandad – junto con la parroquia, el Ayuntamiento y multitud de adhesiones – elevó para confirmar canónicamente este título, aclamado desde tiempo inmemorial y refrendado por la Iglesia hace un siglo.

Durante la celebración de la función por la solemnidad del Corpus Christi el párroco cantillanero, Manuel Valdivieso, dio lectura al comunicado de la Congregación del culto divino y disciplina de los sacramentos, fechado en la Ciudad del Vaticano el pasado 31 de mayo. En el escrito se confirma la solicitud de petición de ratificación del patronazgo, con el deseo de que “dicho patrocino contribuya a suscitar entre los fieles un profundo deseo de santidad”, según concluía el arzobispo Arthur Roche, secretario de la citada congregación.

La lectura oficial del decreto – en latín – tendrá lugar en la celebración de los Dolores Gloriosos. Cultos que la hermandad, por expresa dispensa, celebra en el mes de octubre. El comunicado fue recibido con un aplauso por los fieles que llenaban el templo en la mañana de este domingo.

La noticia fue celebrada con el repique a gloria de las campanas de los cinco templos del pueblo a las 19.00 horas. La del santuario de la Soledad, las de la parroquia de Nuestra Señora de la Asunción, San Bartolomé, la Misericordia, la ermita de la Divina Pastora en Los Pajares y la de la casa hermandad de San Benito voltearon sin descanso, acompañadas por el estallido de cohetes en diversos puntos de la localidad. A esa misma hora, cuando estaba convocado el repique general, muchos devotos de la Virgen se reunieron de forma espontánea en el templo soleano, para felicitar a la Virgen y cantar la Salve.

Fue en el año 1919 cuando el Ayuntamiento, el párroco y el mayordomo de la hermandad elevaron a la Sagrada Congregación de los Ritos la petición para nombrar a la Virgen de la Soledad patrona de Cantillana. La Santa Sede respondió esta petición, refrendado a la Virgen como Patrona el 19 de septiembre de 1920. Al cumplirse el primer centenario de aquella solicitud, la hermandad inició este proceso para dar carácter canónico al patronazgo, hecho que ha sido ahora aprobado. Una noticia que se une a las celebraciones de un año especial para la hermandad, que se encuentra celebrando el CCXXV aniversario del Santuario de la Soledad, un templo neoclásico que fue inaugurado en 1794.