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El presidente de Asemesa, con el ministro de Agricultura, tras la reunión de ayer. / Kiko Huesca (Efe)
La Comisión Europea llevará a la Organización Mundial del Comercio (OMC) las sanciones impuestos por el Gobierno de Estados Unidos a la aceituna negra de mesa española, al entender desde el Gobierno central que solo este órgano puede defender a la totalidad de los afectados por esta situación en España, de los que los olivareros sevillanos son los principales exportadores y, por ende, los más perjudicados.
Es una de las principales conclusiones de la reunión que ayer mantuvieron en Madrid el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, que convocó de urgencia un encuentro en la sede ministerial con con la Asociación Española de Exportadores e Industriales de Aceituna de Mesa (Asemesa), para analizar la entrada en vigor de las sanciones de Estados Unidos a la aceituna negra de mesa española, horas después de que se aplicasen en su globalidad oficialmente.
Asemesa fue tajante antes del encuentro, recordando que «ya no queda ningún acto administrativo más, y todas las decisiones son en firme», al publicarse en el Federal Govern, el boletín oficial de Estados Unidos, la doble orden que sanciona a la aceituna negra española con medidas que se aplican en forma de aranceles hasta llegar a una cantidad global del 34,95 por ciento.
Al término de la reunión, el secretario general de Asemesa, Antonio de Mora, dijo estar satisfecho por el resultado general de la cita, ya que «se ha mostrado la intención de llevar el caso ante la Organización Mundial del Comercio, una decisión que apoyamos totalmente, porque si la Unión Europea (UE) no lo hace estaría aceptando que las ayudas de la PAC son ilegales».
Y es que uno de los argumentos de Estados Unidos para sancionar a la aceituna española es el sistema de ayudas que recibe de la UE, sobre todo en forma de subvenciones de la Política Agraria Común, la citada PAC, por lo que los aceituneros entienden que poner esto en cuestión es «poner en duda todo el sistema de subvenciones de la Unión Europea».
Para De Mora, el recurso de la Comisión Europea ante la OCM tiene que servir para defenderse, porque «se están poniendo en cuestión y en peligro todas las producciones de la Unión Europea», además de indicar que los aceituneros salieron satisfechos del encuentro porque «se van a estudiar medidas extraordinarias de apoyo al sector», que compensen, de alguna forma, las pérdidas que sufren desde comenzó el acoso de Estados Unidos a sus producciones.
Y es que desde este miércoles, y ya no hay más plazos por delante, las cantidades arancelarias están en vigor. Se deben al casi el 20 por ciento del antidumping aplicado desde el pasado 18 de junio, al que se ha sumado ahora el 14,97 por ciento de antisubvención.
A las siete de la mañana de ayer –hora española– eran publicadas las resoluciones oficiales, que, entre otras cosas, las justifican en que «debido a que la ITC –siglas en inglés de la Comisión de Comercio Internacional de Estados Unidos– determinó que las importaciones de aceitunas maduras de España están dañando materialmente a una industria estadounidense, las entradas sin liquidar de dichas mercancías desde España, ingresadas o retiradas del depósito para el consumo, están sujetas a la evaluación de los derechos antidumping».
Esto deja a la aceituna negra sevillana en una situación insostenible. Los datos hablan: en el periodo enero-mayo de este año 2018 las exportaciones al mercado americano han descendido casi un 41 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior, pasando de 12,1 millones de kilos a 7,2.