Todos los colegios, institutos y guarderías de Las Cabezas de San Juan, como las del resto de municipios de Sevilla, habían asumido en los últimos meses como una costumbre de esta nueva era pandémica cerrar un aula durante días cada vez que se registraba un positivo en el alumnado o entre el profesorado. Hasta ahora, ha sido el Ayuntamiento el que ha prestado su propia máquina de desinfección por ozono cada vez que se la han solicitado. Pero, a partir de mañana, cada centro educativo tendrá su propia máquina de desinfección, que no es ya de ozono, sino de rayos ultravioleta, más efectiva y menos nociva para la salud, hasta el punto de que ya no hará falta clausurar el aula durante tanto tiempo. Es la misma tecnología que se ha instalado en los últimos meses en hospitales y otros organismos públicos.
Basta poco más de media hora para desinfectar una clase por completo. El alcalde cabeceño, Francisco José Toajas (PSOE), que hoy ha presentado las máquinas para todos los centros junto a su concejala de Educación, María Castro, se ha congratulado no solo de “poder garantizar la seguridad y la máxima limpieza con unas máquinas con ruedas que se podrán trasladar por los edificios con facilidad”, sino de “poder cumplir con una promesa muy reciente” que “nos parece fundamental para seguir previniendo la transmisión de la COVID-19”. La inversión ha sido de unos 5.000 euros.
Desde el inicio de la pandemia, el Ayuntamiento entregó tabletas a niños en situaciones vulnerables y se dotó a cada centro de geles, mascarillas, termómetros y alfombras desinfectantes. “Lo más caro que nos ha resultado ha sido alquitranar las entradas nuevas de algunos colegios para evitar que se agolpen los alumnos en las entradas y salidas, pero son cosas que o hacemos los ayuntamientos o nadie responde”, asegura la concejala de Educación.