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Patrulla de niños para concienciar a los dueños de perros que hay que recoger los excrementos de sus mascotas. / El Correo
Los niños de Bollullos de la Mitación son un ejemplo para el resto de sus vecinos. En el Consejo Municipal de la Infancia de la localidad, los más pequeños propusieron poner en marcha una campaña de sensibilización para que los dueños de perros recogiesen los excrementos de sus mascotas depositados en la vía pública. Para que la iniciativa fuese más efectiva han llegado a realizar hasta ocho salidas para multar de forma simbólica al incívico que olvidase en la acera las heces de su animal.
Y aunque parezca mentira, en estas rondas han puesto una media de dos o tres sanciones por cada salida y han repartido un centenar de huesitos que contienen bolsitas para la recogida de las cacas de las mascotas.
Las multas simbólicas han consistido en entregar a los infractores un documento en el que se informaba de que si no han recogido los excrementos de su animal doméstico han incumplido el artículo 14 de la ordenanza municipal de protección de los bienes públicos, lo que supone una falta leve y una sanción de 60 a 300 euros.
En caso de que el propietario de una mascota no la tuviese identificada se le indicaba que había incumplido el artículo 17 de la ley de protección de animales, que es una infracción grave, que puede suponer una multa de entre 500 y 2.000 euros.
Por último, si el perro no estaba vacunado, se señalaba a su propietario que estaba cometiendo una falta grave por incumplir el artículo 8 de la ley de protección de animales, lo que puede derivar en una sanción de 500 a 2.000 euros.
Junto a esta multa simbólica, al vecino incívico se le entregaba un documento en el que se reflejan las infracciones y las sanciones que estos incumplimientos de la ley conllevan.
La concejal de Participación Ciudadana, Clara Monrobe Cárdenas, explica que los niños en estas rutas para localizar a vecinos incívicos han estado acompañados en todo momento por un Policía Local y por una educadora social. La edil afirma que los vecinos más pequeños han disfrutado mucho con esta iniciativa «y se mostraban muy contentos cada vez que se encontraban con un vecino que paseaba su perro sin bolsita de plástico para recoger los excrementos de la mascota».
Asegura que el que sean los más pequeños los que llaman la atención por una conducta incívica «da más apuro a los vecinos amonestados, porque son niños los que te indican cómo se debe actuar para tener la ciudad limpia».
Respecto a la imposición de multas reales por parte de la Policía Local, Clara Monrobe reconoce que es muy difícil pillar in fraganti al propietario de un perro que no recoge las heces de su mascota, por lo que indica que este tipo de iniciativas realizadas por los más pequeños son muy efectivas porque además de concienciar a los niños de que hay que mantener el pueblo limpio, también contribuye a que los más mayores sigan su ejemplo.
Este tipo de campañas se van a seguir realizando en Bollullos de la Mitación, una de la 12 ciudades amigas de la infancia que tiene la provincia de Sevilla. Para este 2018 se seguirá educando en civismo a los más pequeños, «porque desde niños hay que inculcarles que hay que cuidar las cosas e implicarles en el proyecto de ciudad», remarca la edil.
No obstante, la concejal de Participación Ciudadana está muy contenta con los vecinos más jóvenes, asegura que están demostrando que están bien educados, pero insiste en que hay que remachar que no se deben realizar actos vandálicos y que hay que cuidar el entorno.