El Ayuntamiento de Mairena del Aljarafe ha ubicado en varios puntos del municipio radares que controlan la velocidad del tráfico, con la particularidad de que sonríen o “se enfadan” con los conductores en función de los límites con los que pasen a su altura.
Se trata, según ha informado el Ayuntamiento, de una idea llamativa para controlar el tráfico de forma experimental, que se ha iniciado con tres radares informativos para concienciar a su ciudadanía con un mensaje cercano y simpático.
Los radares captan la velocidad del coche y la muestran al conductor con el tiempo adecuado para su corrección, una información, en verde, que va acompañada por un emoji alegre y un mensaje de agradecimiento si el vehículo va a la velocidad adecuada, que en las zonas donde se han ubicado es de 30 kilómetros por hora.
En caso de que los coches circulen a más de esa velocidad, la cara se muestra en rojo y con un emoji triste.
Zonas concretas del pueblo
Se trata de unos radares que se han instalado en avenidas urbanas rectas con tránsito importante o con puntos de alta concentración de personas, como la cercanía del colegio Giner de los Ríos en la Avenida de los Olmos; el IES Juan de Mairena, el Centro de Salud de Ciudad Expo, la estación de Metro y el Centro Comercial Metromar en las avenidas De las Américas y Del Descubrimiento.
La velocidad máxima en estas tres avenidas es de 30 kilómetros por hora, el tope a la que el radar deja de sonreír y “riñe” a los conductores que se han pasado del límite, aunque sea por pocos kilómetros de diferencia.
Señales complementarias
Además, el Ayuntamiento ha instalado también ocho señales verticales de pasos de peatones con iluminación, cercanas a los radares mencionados anteriormente, un total de once elementos de ayuda a la circulación y al paseo con los que el Consistorio persigue dos objetivos principales.
Así, quiere asistir a los conductores para que puedan circular con menos riesgos y a los peatones a pasear por Mairena de manera más segura, además de “seguir avanzando en el modelo de ciudad amable apostando por la concienciación”.
Se trata de un paso más dentro de la intención de conseguir que el municipio sea un lugar para las personas, no para los coches, y que sea seguro en todos los sentidos transitar por sus calles, plazas y avenidas.