Un taxista de Sevilla ha sido sancionado con 1.000 euros de multa y la retirada de seis puntos del carnet de conducir tras eludir un control policial y dar positivo tras ser interceptado en consumo de cocaína.
Según han informado fuentes de la Policía Local de Castilleja de la Cuesta (Sevilla), en la noche de ayer el conductor de un taxi llegó con su vehículo a un control de verificación de vehículos de este cuerpo, observando los agentes que realizaba una maniobra brusca para dar la vuelta y eludir a los policías.
Una vez interceptado, los agentes le sometieron al preceptivo control de alcohol y drogas, dando negativo en lo primero, pero positivo en cocaína.
El taxista, que acababa de terminar su turno, no supo justificar ante los agentes por qué había intentando evadir el control, y fue sancionado con 1.000 euros de multa, la retirada de seis puntos del carnet y el vehículo fue inmovilizado.