Olivares

«Papá le ha clavado un cuchillo a mamá»

Los hijos menores presenciaron los hechos según han declarado varios testigos en el juicio

15 may 2019 / 17:14 h - Actualizado: 15 may 2019 / 17:43 h.
"Sucesos"
  • «Papá le ha clavado un cuchillo a mamá»

La tercera sesión del juicio con jurado contra J.M.R.M., el hombre acusado de asesinar a su ex pareja sentimental en el mes de octubre de 2016 en la localidad sevillana de Olivares, se ha celebrado este miércoles en la Audiencia Provincial de Sevilla con las declaraciones de varios testigos oculares, entre las cuales se encuentran el testimonio de una vecina que ha asegurado ver como el encausado le asestó "varios puñaladas" a la víctima.

En concreto, esta vecina ha señalado que en la fecha del incidente iba conduciendo su vehículo por el lugar donde ocurrieron los hechos cuando tuvo que frenar al estar el paso impedido por J.M.R.M. y su expareja "quienes estaban en el suelo" por lo que se bajó del automóvil y pudo observar que el acusado estaba "encima de la víctima" asestándole "varias puñaladas" con un cuchillo y que en las inmediaciones se encontraban los hijos menores ambos "viéndolo" todo.

En su declaración, la testigo ha indicado que la víctima "se encontraba indefensa" al ser bastante delgada y ante la "corpulencia y obesidad" del acusado, quien le propinó "muchas puñaladas" en el cuerpo y que tras darle "la puñalada final en el corazón", ha testificado que J.M.R.M. se levantó, tiró el cuchillo y se fue de allí. Asimismo, ha señalado que la víctima "en los momentos últimos de agonía" se fue gateando hasta el zaguán de la casa en la que trabajaba donde cayó boca arriba "ya muerta" y que, tras esto, apareció el encausado, quien llevaba la ropa "manchada de sangre", con el coche dando marcha atrás hasta que paró para que se montaran sus hijos y seguidamente abandonó el lugar.

De otro lado, ha testificado una vecina de la calle en la que ocurrieron los hechos, quien ha manifestado que estaba en su casa cuando escuchó unos "chillidos" y que, inmediatamente, salió al exterior donde vio al acusado "portando un cuchillo de grandes dimensiones en una mano y agarrando de los pelos a la víctima con la otra" forcejeando en el suelo donde había "bastante sangre". Además, ha añadido que durante el forcejeo la víctima "intentaba defenderse" y que gritaba "quitarle el cuchillo".

Así, esta testigo ha indicado que al ver esta escena salió corriendo para pedir auxilio y cuando volvió al lugar exacto de los hechos, el acusado se había ido "sin socorrer a las víctimas" y se había llevado a los niños "que estaban en frente viendo el incidente".

Igualmente, ha testificado una vecina que desde su balcón, al cual salió tras escuchar gritos de "llamad a alguien, que la ha matado", vio como el acusado se montó en el coche y dio marcha atrás y les ordenó a los niños que subieran, los cuales "se quedaron un momento mirando de un lado a otro sin saber qué debían hacer" y luego se montaron en el coche y se fueron con el encausado.

"PAPÁ LE CLAVÓ UN CUCHILLO A MAMÁ"

Por otra parte, ha declarado como testigo, una de las dos personas que se hicieron cargo de los menores cuando el acusado fue interceptado y detenido por la Guardia Civil en la localidad próxima de Salteras.

Al respecto, la testigo ha declarado que vio como los agentes del Instituto Armado se cruzaron con su vehículo en el camino del acusado y cuando éste se detuvo, le ordenaron que saliera del coche, algo que "tras un tiempo" hizo y procedieron a su detención.

Tras esto, la testigo ha indicado que ella y su marido se ofrecieron a cuidar de los niños mientras los agentes actuantes se encargaban del detenido. De esta manera, ha apuntado que llevaron a los menores a un mesón cercano donde los limpiaron "al estar ambos cubiertos de sangre", ambos así como de sus propios vómitos el más pequeño, y que estaban "muy nerviosos". Así, ha indicado que el más pequeño de los niños "quería que lo cogiera en brazos" y que estuvo llorando "mucho tiempo", le indicó que "papá le había clavado un cuchillo a mamá".

"TOTALMENTE CAMBIADO"

Igualmente, ha declarado como testigo la madre del acusado, quien ha indicado que su hijo en septiembre de 2016, un mes antes de los hechos y cuando la relación con la víctima "había quedado rota", cambió "totalmente" y no era la persona "que conocía".

De ese modo, ha subrayado que J.M.R.M. estaba desde entonces "muy angustiado" así como "somnoliento" y que ya casi "no hablaba" ante la preocupación de que sus hijos estaban teniendo trato "con la nueva relación de su ex pareja" del cual ha señalado que "tenía una mala vida" y que estaba relacionado "con las drogas". Además, ha reconocido que su hijo quedó "muy apenado" cuando, días antes de los hechos, estaba ingresado en el hospital por una hemorragia intestinal y "sus hijos no fueron a verle" ni su ex pareja le decía "cómo se encontraban".

Por último, ha indicado que el día de los hechos, su hijo le llamó "muy angustiado y con la voz entrecortada" para decirle que "le iba a dejar" a sus nietos para que lo cuidara y que "había fracasado", a lo qué le respondió "qué había hecho" y que, inmediatamente, le colgó. Así, ha añadido que "seguidamente" encendió la televisión y se enteró de la noticia.

Cabe recordar que la Fiscalía reclama para J.M.R.M. por un delito de asesinato que se le condene a 20 años de cárcel, así como que se le imponga la medida de libertad vigilada después de la pena privativa de libertad por un periodo de diez años y la privación de la patria potestad respecto de los dos hijos menores de la pareja, Además, por un delito de violencia habitual en el ámbito familiar solicita tres años de prisión y la prohibición de tenencia de armas por un periodo de cuatro años. Igualmente, pide que indemnice con un total de 360.000 euros a los dos hijos menores de edad, la madre y a un hermano de la víctima así como que abone las costas procesales.