La Policía Local de Castilleja de la Cuesta ha detenido a un hombre de 53 años acusado de prender fuego a su vivienda para intentar quemar también las de sus vecinos de edificio, con los que mantiene varios conflictos por distintos motivos en los últimos meses.
La Policía ha informado de que, en la mañana del pasado sábado, fue recibido un aviso que alertaba del incendio de una vivienda en la segunda planta de un edificio del municipio, a donde se dirigieron efectivos policiales y de bomberos, que organizaron el desalojo preventivo del edificio, mientras que una persona fue atendida por un ataque de ansiedad.
Acto seguido, reciben aviso en el mismo sentido ampliando información y comunicando que el incendio había sido provocado por el morador de la vivienda que tiene conflictos vecinales, siendo ampliamente conocido por nuestros agentes.
Localizado por un agente
De camino al lugar, dicho sujeto es localizado por un agente de Policía, y tras realizarse las primeras averiguaciones, se procede a su detención por un presunto Delito Contra la Seguridad Colectiva (incendio), habiendo comportado el hecho un manifiesto peligro para la vida o integridad física de las personas y teniendo nuestros agentes indicios más que suficiente para presuponer su participación directa en el hecho y la voluntariedad en provocar el incendio.
El sujeto, en el momento de su detención portaba multitud de enseres personales y una gran cantidad de mecheros.
La rápida intervención de los Servicios de Emergencias logró que el fuego no se propagase por el edificio y causara males mayores.
Edificio desalojado
El bloque fue desalojado en primera instancia por seguridad, siendo solo una persona atendida por los servicios médicos por un fuerte ataque de ansiedad y no provocando daños más allá de la vivienda afectada propiedad del presunto autor.
Finalmente, se ha dado traspaso de las diligencias y del detenido a Guardia Civil que continúa con las gestiones y la instrucción hasta la puesta a disposición judicial del detenido.
Entre otras premisas, el Código Penal establece que “será castigado con la pena de prisión de uno a tres años el que cometiere los daños previstos (...) mediante incendio, o provocando explosiones, o utilizando cualquier otro medio de similar potencia destructiva o que genere un riesgo relevante de explosión o de causación de otros daños de especial gravedad, o poniendo en peligro la vida o la integridad de las personas”.