«Quiero un pueblo atractivo para que vengan empresas»

En el pasado mandato, el equipo socialista, liderado por Antonio Campos, puso en pie varias infraestructuras en los cuatro núcleos poblacionales del municipio, que le valieron un aumento de votos y consolidación en la Alcaldía en los pasados comicios

14 dic 2015 / 11:00 h - Actualizado: 13 dic 2015 / 23:39 h.
  • Antonio Campos, el alcalde de Alcalá del Río, promete pelear por mejorar su municipio. / El Correo
    Antonio Campos, el alcalde de Alcalá del Río, promete pelear por mejorar su municipio. / El Correo

{Después de conseguir dos colegios, un centro de salud y un centro cívico en las pedanías e infraestructuras como el nuevo campo de fútbol o la recuperación de la plaza de toros en Alcalá, las elecciones le dieron algunos votos más pero un gobierno en minoría.

—¿Es exigente el electorado?

—Los ciudadanos son muy exigentes. Pero es así como debe ser. La situación que estamos viviendo es tan difícil que los vecinos y vecinas deben exigir a quienes los representan. Desde que llegamos a la Alcaldía se han creado más infraestructuras que en los últimos 20 años. En estos cuatro años del mandato anterior hemos ahorrado al Ayuntamiento más de tres millones de euros, disminuyendo una deuda que es de los vecinos. Que hayamos sido la única opción política que ha aumentado en votos con la exigencia que hay hoy día en política le da mucho más valor al apoyo.

—¿Qué es lo más difícil de gobernar en cuatro núcleos de población?

—Tener contento a todo el mundo. Si Alcalá, que es el núcleo más grande, con unos 9.000 habitantes, tiene un centro de salud, para las pedanías no puedes más que obtener un consultorio médico. Pero ese consultorio médico tiene que estar en las mejores condiciones para el uso de los ciudadanos. Está claro que tienes que dispersar mucho los recursos de un Ayuntamiento. Pero lejos de ser una dificultad, es un reto.

—¿Cuál es el trabajo que se está haciendo en las pedanías?

—Lo que se ha hecho en El Viar representa el esquema que tenemos para las pedanías. Primero se construyó el colegio para El Viar y Esquivel, ahora nos falta el de San Ignacio. En Esquivel se está construyendo ahora un centro cívico y un consultorio médico, como ya se ha hecho en El Viar. Educación, participación ciudadana y salud, son los ejes de la política que estamos llevando a cabo en las pedanías.

—¿Cuál es ese gran proyecto que promete en su programa?

—Alcalá del Río no tenía proyección ninguna. Se hacían cosas, yo no digo que no, pero no había una línea marcada. Nuestro proyecto se inició en 2011 y continúa ahora, cumpliendo los objetivos que nos hemos ido marcando. No solo estamos en un sitio privilegiado de La Vega, sino que tenemos que ser uno de los mejores estructurados que haya. Eso se hace creando nuevas infraestructuras.

—La construcción de infraestructuras es el camino que se han marcado, pero ¿cuál es ese proyecto final?

—Hacer de Alcalá un municipio atractivo para que vengan nuevas empresas.

—¿Y nuevos vecinos?

—Por supuesto, bienvenidos sean.

—¿A cuánto asciende la deuda municipal?

—Cuando llegamos en 2011 nos encontramos 12 millones de euros de deuda. Para un Ayuntamiento con un presupuesto de siete millones de euros, la situación era la bancarrota. Cuando me senté con mi equipo de gobierno les dije que esto era lo que teníamos y que no podíamos bajar los brazos ninguno. Todos se remangaron y se pusieron a trabajar. Ese es uno de los momento más bonitos que he vivido como alcalde. Todo lo que hemos hecho en estos cuatro años está pagado pero todavía estamos arreglando lo que nos encontramos. Y, como he mencionado antes, hemos conseguido reducirla en 3.300.000 euros.

—Viendo la deuda y viendo las infraestructuras que se han puesto en marcha, ¿qué clase de varita mágica tiene este gobierno?

—Tener cabeza y criterio a la hora de ejecutar cada una de las acciones. Que las infraestructuras que hagamos sean duraderas y no tengamos que echarle doble dinero encima. Lo que hemos hecho en El Viar representa perfectamente el planteamiento de este equipo. La construcción de un colegio nuevo nos ha permitido el acondicionamiento de ese edificio como centro cívico. Todo se estudia al detalle para sacar el mayor rendimiento a cada objetivo. Cuando nos conceden una subvención para cualquier cosa, no esperamos a recibirla para pagar. Primero se paga, tirando de los recursos propios del Ayuntamiento, y luego cuando llega la subvención se dispone de un líquido para cualquier otra cosa. Ese es nuestro modelo de caja única.

—Hay otras infraestructuras que no dependen de usted pero que van a tener un impacto en la localidad, como es el Vial Metropolitano de Acceso Norte, del que ya se ha abierto un ramal. ¿Cómo lo reciben?

—Nos va a dar mucha conexión con Sevilla y espero que esté terminado en dos años. Pero para que sea verdaderamente útil primero tiene que estar terminado el viaducto de La Rinconada, que es un proyecto de una inversión mayor y que yo estaré pidiendo cada vez que pueda en la delegación para que no se demore.

—Usted tiene un sueldo de 42.000 euros brutos al año. ¿Justifica esta cifra?

—El sueldo del alcalde se vota en pleno y no tuvo ningún voto en contra y te aseguro que es mucho menor que el que había anteriormente. De hecho, la nueva ley reguladora de Bases de Régimen Local limita los sueldos de alcaldes y concejales.

—¿En qué va a mejorar la localidad en los próximos años?

—En dos años tendremos una nueva jefatura de policía y un nuevo centro de día que en la parte de arriba queremos que sea sala de estudios. Pelearemos por un nuevo colegio en la zona de Huerta del Rey y por otro para la pedanía de San Ignacio. ~