«Señores policías, ya que estoy borracho, escóltenme hasta casa»

Un conductor ebrio pide a la Policía de Castilleja de la Cuesta que le acompañen. Quería llegar a Benacazón habiendo dado positivo en alcohol y cocaína

30 abr 2018 / 18:44 h - Actualizado: 30 abr 2018 / 23:01 h.
"Consumo de alcohol","Seguridad vial","Policía Local","Drogas"
  • El alcoholímetro demostró que el conductor bebió más de lo permitido. / F.C.
    El alcoholímetro demostró que el conductor bebió más de lo permitido. / F.C.

«Ya que estoy borracho y no puedo conducir, ¿por qué no me escoltan hasta mi casa?» Expuestos a escuchar cosas llamativas casi cada día, los agentes de la Policía Local de localidad sevillana de Castilleja de la Cuesta se encontraron el pasado sábado con algo que, hasta entonces, no se les había cruzado por delante: un conductor que les pedía escolta para no tener que dejar su coche abandonado.

La llamativa actuación tuvo lugar cuando los agentes que patrullaban las calles vieron cómo un vehículo realizaba una maniobra sospechosa, sin un control aparente del mismo por parte de su conductor. La maniobra les hizo acercarse al coche, y le dieron el alta. Aunque en algunos casos es necesaria la prueba de la alcoholemia, en esta ocasión los signos parecían más que evidentes.

Los agentes informaron al conductor de que se le iban a realizar las pertinentes pruebas de detección de alcohol y drogas, a las que se sometió sin dar ningún problema, y arrojando una alcoholemía de 1,04 mg/l, más de cuatro veces del máximo permitido para conducir, asimismo dio positivo en la prueba de detección de consumo de drogas. El conductor, según las citadas pruebas, había consumido cocaína. Además, se había tomado «cuatro cubatas», siempre según la versión que dio a los policías cuando le preguntaron sobre el resultado del etilómetro.

En ese momento, los policías le informaron de que el vehículo quedaba inmovilizando, realizando entonces la petición de que una patrulla policial le escoltase hasta su casa, a unos 20 kilómetros. El conductor pasaba por Castilleja de la Cuesta camino de la localidad de Benacazón. No obstante, tuvo que llegar hasta Benacazón por sus propios medio, pero sin conducir, según las mismas fuentes, que han destacado que nunca habían tenido que responder a una petición semejante por parte de un denunciado en circunstancias similares.

En estos casos, si no hay ninguna persona que se pueda hacer cargo de conducir el vehículo, este queda retenido en los almacenes municipales, hasta que el conductor lo recoge, una vez que demuestra con una prueba que ya no se encuentra bajo los efectos del alcohol. Si no lo hace, el vehículo se puede quedar custodiado por la Policía de forma indefinida.