Susto importante el que se llevó una vecina de Castilleja de la Cuesta, que este lunes, al salir a su patio, descubrió un enorme ejemplar de culebra de herradura, un tipo de serpiente relativamente común en el sur de España, pero que no suele verse habitualmente en zonas habitadas.
La Policía Local ha informado de que tuvo que acudir a la llamada de una persona con un gran estado de ansiedad, al haberse encontrado al ofidio en su patio.
Es cierto que no es peligrosa, pero sí puede morder si se siente amenazada, de modo que un agente policial especialista en este tipo de casos se desplazó a la vivienda y la capturó sin causarle daño alguno.
Posteriormente, la trasladó en una caja hasta un campo cercano y la soltó en mitad del mismo, ya en su medio natural.
La serpiente en cuestión
La culebra de herradura (Hemorrhois hippocrepis) es una especie de serpiente de la familia Colubridae. Se trata de una serpiente muy ágil que puede subirse con una facilidad asombrosa a arbustos, árboles y escarpes en busca de presas o nidos de aves.
La culebra de herradura puede medir desde un metro hasta 1,56. Presenta un color amarillo muy poco patente, ya que tanto la cabeza como el dorso poseen manchas negras que, en conjunto, dan una tonalidad al reptil oscura casi negra.
En la parte posterior de la cabeza, una de estas manchas toma, con frecuencia, la forma de una herradura que rodea la nuca. A esta característica se le debe su denominación vulgar.
Si se la acosa, se defiende. Son capaces de responder a cualquier ataque, incluso si la especie que les ataca es el doble de grande. Además, si alguna otra especie trata de cazarla, se revuelve y utiliza su cola a modo de látigo o muerde.