Un intercambio de pareja que puede salir caro

La Policía de Castilleja de la Cuesta denuncia a una mujer que se cambió de asiento con su pareja para hacer ver que ella conducía, y al final dio positivo penal en alcoholemia

27 dic 2022 / 20:44 h - Actualizado: 27 dic 2022 / 20:47 h.
"Consumo de alcohol","Policía Local"
  • Un intercambio de pareja que puede salir caro

La Policía Local de Castilleja de la Cuesta ha denunciado por la vía penal a una conductora que se intercambió con su pareja, que iba conduciendo su coche, al llegar a un control policial, aunque cuando fue sometida al test de alcoholemia arrojó un nivel de 0,70, por encima de la tasa meramente administrativa.

Según han informado fuentes policiales, los agentes que se encontraban en un control de tráfico observaron que un vehículo que iba llegando a su altura se detuvo en el margen derecho de la calzada, para, como pudieron ver, intercambiarse los asientos el hombre que iba conduciendo con la mujer que le acompañaba.

Los dos iban ebrios

Segundos después llegaron al punto de verificación, y los agentes comprobaron que ambos presentaban síntomas de haber ingerido alcohol, de hecho, solo tras acercarse a los agentes estos ya se dieron cuenta de que estaba claro que habían cogido el volante (y además por turnos) estando bajo los efectos del consumo de alcohol.

A esto se unió que fueron informados de que su maniobra había sido vista por la Policía, de modo que, diese el nivel que diese la mujer, posteriormente se le iba a realizar un control de alcoholemia al copiloto.

De hecho, se pararon unos metros antes de llegar al control, intentaron hacerlo con todo el disimulo posible, y finalmente siguieron la marcha como si nadie se hubiese dado cuenta.

Un nivel penal

La conductora fue sometida a un control de alcoholemia, arrojando una tasa de 0,70 miligramos de alcohol por litro de aire expirado, 0,10 por encima de la tasa que se quedaría en sanción administrativa, y acto seguido se llevó a cabo el mismo control, en este caso al copiloto, que solo tenía un nivel de 0,40, con lo que, en el caso de no haberse cambiado de asiento, habría quedado todo en una sanción administrativa.

Ante la situación que presentaban, el vehículo fue retenido y el expediente enviado a un juzgado de Sevilla, con la petición de retirada de seis puntos del carné de conducir y una sanción económica de 1.000 euros para la conductora que llevaba el coche en el momento de llegar a la altura del control policial.

En este caso, además, el vehículo queda retenido en dependencias policiales hasta que vaya a retirarlo una persona que no esté bajo los efectos del alcohol, lo que hay que corroborar con el consiguiente control ante los mismos agentes locales.