“Un peligro al volante”. De esta forma tan gráfica define la Policía Local de Castilleja de la Cuesta al conductor de una furgoneta de 3.500 kilos de carga tras ser detectado haciendo eses por la localidad y saltarse un semáforo, arrojando posteriormente una tasa de alcoholemia de 0.77 miligramos de alcohol por litro de aire respirado.
Fue interceptado justo a tiempo. Según ha informado la Policía en sus redes sociales oficiales, los agentes recibieron el aviso de que una furgoneta de gran tonelaje estaba por la ciudad «haciendo eses» por las calles, y cuando la localizaron se dieron cuenta de que se había saltado un semáforo en rojo, por lo que se procedió a darle el alto al conductor.
Cuando fue detenido en la vía pública, además de otros trámites relacionados con la documentación del vehículo, fue sometido a la prueba de alcoholemia, que arrojó el mencionado resultado de 0,77, más de cinco veces del legal permitido a los conductores profesionales, que es de 0.15.
Síntoma evidentes de embriaguez
Además, la Policía ha indicado que el conductor mostraba «síntomas evidentes» de haber consumido alcohol antes de comenzar a conducir.
Por todo ello, ha sido investigado por un presunto delito contra la seguridad del tráfico con agravante de alcoholemia, por lo que será sometido a un juicio rápido.
La furgoneta, evidentemente, quedó inmovilizada hasta que otra persona se pudo hacer cargo de lo que llevaba en su interior para proceder a terminar el reparto.
Sanciones
Al conductor en cuestión le va costar olvidar lo que ha hecho. Y es que si la tasa en aire espirado está entre los 0,15 mg/l y 0,30 mg/l se retirarán 4 puntos del carnet de conducir, y se le impondrá una multa de 500 euros.
Si la tasa está por encima de los 0,30 mg/l se procederá a retirar 6 puntos y la multa será de 1.000 euros.
Pero mucho cuidado: si un conductor supera los 0,60 miligramos por litro en aire espirado o los 1,2 gramos por litro en sangre estará incurriendo en una infracción penal, y el castigo es mucho mayor, ya que puede ingresar en prisión entre 3 a 6 meses o bien ser condenado a trabajos para la comunidad por un periodo entre uno y tres meses.
Como poco, perderá el carnet de conducir por un año, y podría no recuperarlo hasta que pasen cuatro años de la infracción cometida.
Y, para que nada falte, en caso de accidente, con o sin daños personales las aseguradoras no se hacen responsable de los posibles daños e indemnizaciones a las que se tengan que enfrentar.