El Ayuntamiento de Marchena, localidad natal de Lorenzo Coullaut Valera, autor entre otras obras de los monumentos a Bécquer en Sevilla o a Cervantes en Madrid, ha recuperado un crucifijo original realizado por el escultor en una fecha no determinada, que hasta ahora pertenecía a un coleccionista privado de Baleares.
Según ha informado el Ayuntamiento, el crucifijo ha podido volver a Marchena tras varios meses de negociaciones con su propietario, dentro de las acciones puestas en marcha en la localidad para ampliar su patrimonio, y concretamente el relacionado con el escultor, que está considerado el referente español en su época.
Análisis de su estado
Tras ser llevado a la localidad para una primera revisión, la obra se ha puesto en manos del Instituto de Patrimonio de Sevilla, entidad que se encargará de analizar su estado y prepararlo para ser expuesto en el museo que lleva el nombre del artista en su pueblo.
Se trata de una talla de madera, de estilo de la imaginería sevillana, con la rareza de ser una de las pocas obras que Coullaut Valera hizo de estas características, y que hasta hace 30 años estaba en un anticuario de Bilbao, donde fue adquirido.
Su ubicación definitiva
El museo donde será expuesto se ubica en la antigua Puerta de Morón, torreón almohade del siglo XII perteneciente a la muralla de la ciudad de Marchena, y fue inaugurado el 12 de Octubre de 1990 con la colección adquirida por el Ayuntamiento de Marchena.
Consta de esculturas y relieves que fueron propiedad del nieto del artista, Carlos Coullaut Valera, a las que se han añadido piezas de otro nieto, Enrique Iniesta Coullaut Valera, junto a obras que se han ido recuperando o réplicas en escala de sus monumentos más famosos.
Entre ellas, en agosto de 2020 el Ayuntamiento recuperaba un dibujo original del escultor, que le pudo servir para realizar la obra «Las tres marcheneras», expuesta en el museo, o bien para las tres imágenes femeninas de un Calvario, «ya que era habitual que los artistas hiciesen un dibujo inicial y luego fuesen modificando la idea inicial a raíz de la persona que le encargaba el trabajo”.
El dibujo estuvo en los últimos años en manos del escultor natural de Écija Rafael Armenta, autor, entre otras, del monumento a Pepe Marchena, la fuente de la Constitución o la de la Concordia del municipio sevillano.
Hace más de 40 años tuvo contacto con Enrique Iniesta Coullaut-Valera, y en 1991 le regaló el dibujo realizado por su abuelo, con una inscripción en su parte trasera con el siguiente mensaje: «Para Rafael Armenta, el escultor de Écija y de Marchena, en la admiración y la amistad».