La fama del agua de coco lleva algunos años impuesta en el mercado, pero este verano parece que la venta de dicha bebida se ha disparado. En un principio, este producto estaba enfocado para los amantes de la vida healthy, pues tiene un sabor dulce, es baja en grasas y carbohidratos. No obstante, actualmente está expandiéndose a todo tipo de públicos que buscan probar nuevas opciones, cambiar a bebidas menos azucaradas o beneficiarse de todas las propiedades del agua de coco.
Rica en electrolitos
Se trata de la bebida ideal para después del entrenamiento por su alto contenido en electrolitos. Algunas investigaciones reflejan que el agua de coco ayuda a restablecer la hidratación de nuestro cuerpo mejor que la propia agua. Se trata de una bebida con grandes cantidades de sodio y potasio, justamente los electrolitos que perdemos durante la realización de ejercicio físico.
Obviamente, los nutricionistas advierten de que, a pesar de ayudarnos a recuperarnos mejor de nuestro entrenamiento, el agua de coco contiene más azúcares y calorías que el agua, por lo que hay que incluirla en nuestra dieta con moderación.
Antioxidantes
Aunque no es su mayor cualidad, el agua de coco es una fuente de vitamina C, lo que la convierte en una bebida con propiedades antioxidantes. Sin embargo, esta propiedad solo es relevante si se trata de una bebida poco procesada y sin pasteurizaciones por calor, es decir, contra más fresca y natural, más cantidad de antioxidantes beneficiosos para nuestro organismo obtenemos.
Baja en calorías
Esta bebida tropical es ideal si estamos cuidándonos o queremos llevar una dieta saludable, pues solo contiene 50 kilocalorías por cada 250 ml y al proceder de una fruta, posee azúcares naturales como la fructosa y la glucosa. Además, aporta pocos carbohidratos y grasas, y sus propiedades diuréticas ayudan a eliminar el exceso de líquido de nuestro cuerpo.
Digestión
El potasio y el magnesio del agua de coco pueden ayudar a combatir las malas digestiones, el reflujo o la acidez que se presentan tras una comida. De igual forma, los especialistas suelen recurrir al agua de coco para reponer el agua y los nutrientes que se pierden en grandes cantidades cuando se sufre algún tipo de trastorno intestinal como, por ejemplo, diarrea.
Contra la resaca
Se trata de una de las propiedades menos conocidas del agua de coco, pero de las más efectivas. Al estar llena de potasio, tomar esta bebida tras una noche de desenfreno nos ayudará a hidratarnos de nuevo y calmar el estómago. Además, el azúcar natural que contiene contribuirá a aumentar el azúcar en sangre y combatir las náuseas propias de la resaca.
A pesar de ser natural y saludable, hay que tener en cuenta que el consumo de agua de coco debe ser moderado, como cualquier otro alimento. Se recomienda que las personas con enfermedades renales consulten con un nutricionista antes de consumir este producto, ya que se trata de un alimento con un alto contenido en potasio.