Salustiano García renunció a cobrar por el cartel de la Semana Santa de Sevilla

El Consejo de Hermandades no tendrá la obra original y el artista regalará a su hijo la pintura que tiene en su domicilio

Salustiano, con su hijo Horacio, delante de su Cristo Resucitado para la Semana Santa de Sevilla EFE/ David Arjona / Manolo Ruiz

Manolo Ruiz

Salustiano García es el primer artista que no ha cobrado por realizar el cartel de la Semana Santa de Sevilla desde que en 2020 Daniel Bilbao fuera el primer pintor retribuido. El pintor de Villaverde ha entregado un cuadro de luz al Consejo y el original se lo ha regalado a su hijo.

El Correo de Andalucía ha intentado ponerse en contacto con el presidente del Consejo de Cofradías para conocer, dada la novedad del formato recibido, si la remuneración habitual del cartelista, que asciende a 3.000 euros, ha sido destinada a sufragar una reproducción. Salustiano, en una entrevista concedida desde su domicilio al programa Mesa de Análisis de Canal Sur TV, ha confirmado que «el cartel es un encargo no remunerado, considerándolo un regalo que él ofrece a la ciudad y a los cristianos y cofrades locales». En la calle San Gregorio, sede la institución cofradiera, han decidido que no se va a ofrecer ningún tipo de declaración.

¿Desde cuándo se paga por el cartel?

En septiembre de 2008 se produjo un hecho sin precedentes en la historia de la cartelería oficial de la Semana Santa de Sevilla. El pintor Ricardo Suárez rechazó la propuesta de realizar el cartel, siguiendo fielmente las ideas que había venido promulgando anteriormente: La búsqueda de remuneración económica por la obra pictórica que anunciase la Semana Santa de Sevilla. La respuesta de Suárez dejó al presidente Adolfo Arenas y a la Junta Superior en la tesitura de tener que recurrir al segundo en las quinielas: Juan Antonio Huguet Pretel.

Las manifestaciones del pintor de la Puerta Real en Diario de Sevilla fueron premonitorias:

«El Consejo no puede comprometer a un autor gratuitamente y exponerlo a una crítica soez, vil e incisiva. No paga un duro cuando tiene ingresos anuales bastante curiosos. La pintura es una profesión, no un hobbie. En los encargos cofradieros hay que ofrecer siempre un presupuesto».

Noviembre de 2018 Francisco Vélez logra imponerse a Antonio Piñero por nueve votos de diferencia en las elecciones destinadas a elegir al sucesor de Adolfo Arenas al frente del Consejo de Cofradías. Este cambio en la presidencia se produjo en un momento crítico, ya que la imagen pública del Consejo atravesaba, quizás, su peor momento histórico. Después del escrutinio en San Gregorio, Vélez declaró: «Vengo a recuperar la confianza, el cariño y la autoridad moral de las hermandades y de la ciudad de Sevilla hacia esta institución, que hoy en día está falta de ello».

En octubre de 2019, el Consejo de Cofradías tomó la decisión de asignar un pago al cartel oficial que anunciaría la Semana Santa. La Junta Superior de la institución, presidida por Francisco Vélez, determinó que el pintor encargado de realizar la obra debía recibir una compensación por su trabajo. Para lograr esto, se llegó a un acuerdo con las empresas patrocinadoras del programa de mano que edita el Consejo de Cofradías con los horarios e itinerarios de las hermandades en sus procesiones de Semana Santa. De todo lo que el Consejo ingresa por estos patrocinios se extraen alrededor de 3.000 euros para gratificar al artista.

Es relevante destacar la firme voluntad del Consejo de continuar pagando anualmente al artista seleccionado, manteniendo siempre la misma cantidad para evitar distinciones. Daniel Bilbao fue el primer artista retribuido por su obra en el cartel de la Semana Santa de 2020. Le siguieron Chema Rodríguez en 2021, Manolo Cuervo en 2022 y Daniel Franca en 2023, cada uno contribuyendo con sus originales que ahora forman parte de la pinacoteca de la calle San Gregorio.

El precio acordado entre la institución y el artista se sitúa considerablemente por debajo del valor de mercado de la obra y del caché de los artistas. Los tres mil euros asignados a cada pintor por el encargo, junto con la cesión de la propiedad de la obra original, se formalizan mediante la emisión de una factura y se establecen en un contrato verbal.

Este contrato se lleva a cabo a través de una llamada del presidente del Consejo al designado, durante la cual se le notifica su designación por parte del órgano cofradiero y se acuerda la retribución que recibiría en caso de aceptar el encargo.

¿Qué ha cambiado en 2024?

Salustiano García recibió el encargo para el año 2024 del Consejo General de Hermandades y Cofradías de Sevilla. Sabían exactamente a quién le encargaban la obra y lo que buscaban: «que sea un Salustiano». Como la obra original que luce en su casa y bajo el formato habitual en el que trabaja el pintor sevillano, el tondo. Con él de fondo, ha concedido numerosas entrevistas y en la mañana de hoy, en los micrófonos del programa de Jesús Vigorra en Canal Sur Radio, aseguró que el destinatario de la obra original es, según Salustiano, «mi hijo, es un regalo para él», desmintiendo categóricamente que la obra original «vaya a ser vendida» por varias decenas de miles de euros.

El cartel de la Semana Santa de Sevilla 2024, fue presentado en la sede de Caja Rural en una caja de luz, un formato de reproducción que Salustiano ha considerado idóneo para poder proyectar la potencia comunicativa del concepto y para el que ha trabajado durante cuatro meses, con un modelo natural, su hijo Horacio, como se hace en las universidades.

¿Qué es una caja de luz?

Ya conocemos que el autor tiene el tondo original en su domicilio y quién es el destinatario final. Lo que los cofrades pudieron ver, ya sea in situ o a través de la señal de streaming producida por el propio Consejo de Cofradías, fue una caja de luz.

Una caja de luz es una opción funcional y versátil para diversas aplicaciones, destacándose por ofrecer retroiluminación fija o de intensidad variable. Su diseño incluye una moldura en madera lacada en colores personalizados o un perfil de aluminio en negro, blanco o plata.

La capacidad de impresión en textil puede alcanzar hasta 5 metros de ancho, según fuentes consultadas, lo que le permite adaptarse a distintos requerimientos de tamaño. Además, cuenta con la conveniencia de un mando a distancia y un regulador de intensidad lumínica.

Diseñada para aplicaciones en exposiciones artísticas, publicidad, decoración y señalética, la caja de luz destaca por su alta definición de impresión. Su versatilidad se extiende tanto a interiores como exteriores, proporcionando soluciones visuales sin comprometer la calidad. En el mercado especializado, su precio ronda los 700 euros por metro cuadrado.

Pulsa para ver más contenido para ti

En la exposición que anualmente monta Cajasol en torno al Cartel de la Semana Santa de Sevilla, se podrá contemplar el tondo pintado por Salustiano y conocer de cerca el proceso creativo de la obra.

Pulsa para ver más contenido para ti