Lucien Agoumé se carga el partido 700 de Jesús Navas con el Sevilla (1-0)

Metido en campo rival desde el comienzo, el Sevilla Fútbol Club de Xavi García Pimienta salió decidido a por la victoria en Butarque ante el CD Leganés, sorprendiendo el barcelonés en el once con Kelechi Iheanacho formando en ataque junto a Isaac Romero y Dodi Lukebakio. El nigeriano fue el que comenzó en la izquierda con el lebrijano en punta.

Lució el conjunto nervionense en su tercera camiseta un detalle significativo con un número para poder hacer bizum y recaudar dinero para los afectados por la DANA.

La puesta en escena de Pimienta no dio sus frutos y el Sevilla descubrió que Dmitrovic estaba jugando en el minuto 57, cuando Lukebakio consiguió probarlo con un tibio disparo desde fuera del área. Cuando todo se encaminaba al empate en el encuentro 700 oficial de Jesús Navas con la elástica sevillista Lucien Agoumé cometió una temeridad y echó por tierra cualquier atisbo de puntuar en Butarque. Penalti ridículo, roja y 1-0.

Gozó el Sevilla de una gran ocasión para adelantarse en el marcador en una de las jugadas que aún se le resisten, el balón parado. Lukebakio lo provocó y lo botó, Sambi Lokonga prolongó en el primer palo y Lucien Agoumé no fue capaz de llegar en boca de gol para hacer el primero.

Una primera parte con muchos espacios y con poco control

Tuvo excesivo tiempo para pensar el mediocentro belgacongoleño y metió un balón preciso para el nigeriano, que no pudo dirigir bien el remate y el balón terminó nuevamente en la esquina. El exsevillista Munir El Haddadi fue el primero en dirigir un disparo entre los tres palos, reaccionando bien Álvaro Fernández.

De área a área y sin excesivo control, entró el partido en una sucesión de llegadas por parte de los de García Pimienta y Borja Jiménez.

Se empezó a animar el Leganés con dos llegadas de Miguel de la Fuente tras unos minutos en los que sucedió entre poco y nada en la contienda. El de Tudela de Duero armó rápido su derecha en la segunda que tuvo y obligó a que el meta riojano del Sevilla pusiera fuerte las piernas para evitar el tanto. Lamió acto seguido el lateral de la red de Álvaro Fernández una falta que sacó Munir.

No atraviesa un buen momento Isaac Romero y se le nota. Iheanacho le metió un buen balón pasada la media hora de partido y en el 36' volvió a tener una muy buena para definir desde la frontal, pero el canterano la mandó a las nubes.

Volvió a intimidar el cuadro pepinero a los sevillistas con un centro colgado al segundo palo que encontró a Brasanac, pero el cabezazo del serbio no encontró compañero en el área y se paseó sin ir a mayores.

Juan Luis Pulido Santana hizo sonar su silbato una vez se cumplieron los 45 minutos y mandó a Leganés y Sevilla a los vestuarios.

La tónica del primer tiempo, con aproximaciones de pepineros y sevillistas sin apenas peligro se sucedió en los compases iniciales del segundo acto, en los que no hubo modificaciones en el once ni por parte de Borja Jiménez ni de García Pimienta.

Quiso ponerle magia al partido Dodi Lukebakio, con una diagonal perfecta trazada desde la derecha al centro y buscando la escuadra contraria, pero su jugada típica acabó en nada por la dificultad para armar el golpeo ante tantas piernas rivales. Fue el mismo belgacongoleño el que descubrió que había portería y portero rival probando a Dmitrovic en el 57'.

Empezó a navegar el Sevilla en Butarque sin ser capaz de ofrecer más que llegadas sin malicia y cuando todo se aproximaba a su fin un error de Agoumé decantó la balanza.

Lucien Agoumé emula a Marcao con un penalti ridículo

La jornada pasada fue el turno de Marcao, con un manotazo en la garganta a Zubimendi quien echó por tierra cualquier opción de puntuar ante la Real Sociedad, y frente al Leganés, después de 80 minutos sin cometer ningún error empezaba a ser raro ver al Sevilla de Pimienta terminar un encuentro sin que algo extraño sucediera.

Se encargó de dinamitar las opciones de rascar un punto tras no sufrir en toda la contienda Lucien Agoumé. El pivote francés cometió un penalti infantil y ridículo al tratar de ceder un balón a Álvaro Fernández. Erró en el golpeo dejándola corta y al no existir disputa del esférico Pulido Santana lo expulsó al agarrar a Seydouba Cissé cuando encaraba al riojano. Miguel de la Fuente hizo el tanto desde los once metros golpeando al centro la pena máxima.

El gol desconectó por completo a los nervionenses y no supieron reponerse a un duro golpe a diez del final. Cometiendo errores tan flagrantes en una cantidad importante de partidos es muy difícil escalar posiciones en la tabla. El punto que era justo se desvaneció con una acción totalmente surrealista de Agoumé. Una nueva derrota y dos semanas para que García Pimienta encuentre al menos a once jugadores profesionales y preparados para la élite.