Pasillito y lágrimas contenidas en el adiós de Navas: "Lo que he vivido ha sido espectacular"

Jesús Navas ha dicho adiós este domingo al fútbol. Aunque el Sevilla ha acabado sucumbiendo ante el Real Madrid en su último partido con la camiseta de su club del alma, lejos del resultado, el protagonista del encuentro ha sido el de Los Palacios. Tanto sus compañeros como el equipo rival le han dado su lugar en el Bernabéu y el público del estadio, a su vez, ha reconocido con una sonora ovación al jugador más laureado de la Selección Española y del Sevilla.

Nada más pisar el césped, toda la plantilla madridista y la del Sevilla le han hecho un pasillito para demostrarle el respeto que se ha ganado dentro y fuera del campo. Como broche de oro a este gesto, Luka Modrić le ha hecho entrega de una camiseta firmada por todos los jugadores del encuentro, con una frase que rezaba Leyenda Jesús, desde el inicio hasta el final.

Manteniendo la entereza a duras penas y con el gesto contenido, finalmente Jesús Navas comenzó el partido en el banquillo y no fue hasta el minuto 64 cuando saltó al campo de juego, relevando a Stanis Idumbo y llevándose el gran aplauso de la jornada en el Bernabéu. Cabeza gacha y lágrimas contenidas, muestra de la humildad que siempre ha reflejado.

"He conseguido muchas cosas, pero este cariño es increíble", reconocía nada más terminar el encuentro. El palaciego está aún abrumado por todos los reconocimientos que está recibiendo en esta última etapa como jugador en el club de su vida. "Creo que lo más importante es no haber cambiado desde el primer día, seguir siendo el mismo y eso es lo más bonito", asumía para dar de inmediato las gracias al Madrid, al Bernabéu y a toda la afición que ha querido arroparle en este último partido.

"Me quedo con la tranquilidad de haberlo dado todo"

Navas lleva días y se puede decir que meses recibiendo homenaje tras homenaje en los campos por los que va pasando. "La verdad es que llevo casi seis meses ya viendo que se acaba". Si ante el Celta fue la despedida de su afición en el Sánchez-Pizjuán, ahora es el adiós definitivo como jugador profesional. Por eso, no es raro ver esa emoción que por mucha contención, se ha hecho presente una vez que se iba acercando el final del encuentro.

"Estaba ya muy emocionado. Son muchos días viviendo tanto cariño, recibiendo tanto amor de todo el mundo y, bueno, al final uno ya explota", confesaba en la zona mixta donde reconocía que se va tranquilo "de haberlo dado todo y haber hecho feliz a tanta gente".

Aunque cuelga las botas, parece que no cierra la puerta a un futuro en el fútbol. "Mi vida es fútbol. Es complicado decir hasta aquí. Al final llevo cuatro o cinco años con la cadera mal y este último año sí que ha ido a más. Es difícil, me ha tocado esta situación, pero estoy tranquilo, orgulloso de lo que he hecho".

Un partido que se repite 20 años después

Hace justo 20 años, también un 22 de diciembre, Jesús Navas debutaba ante el Madrid. Por aquel entonces, ese joven que soñaba con ser alguien en el fútbol ni se imaginaba lo que llegaría después. "Uno lo que sueña es jugar con tu Sevilla, en el primer equipo, poder estar algún día con la Selección y, al final, era un niño y todo, es verdad, que ha pasado muy rápido", asume el sevillista en el ocaso de su carrera, pero con la tranquilidad de haber hecho bien las cosas.

"He conseguido muchas cosas para mi Sevilla, para la Selección, en Manchester, que también pasé unos años muy buenos, y por eso quiero dar las gracias a todos por este camino".

Rodeado siempre de su familia

Reconoce que esta despedida es complicada, pero se va, como siempre, rodeado de su familia. "He ido ahí a saludar a toda mi familia, que ha estado en todos los momentos, que había momentos difíciles también y ellos siempre están ahí". El de Los Palacios narra orgulloso cómo los suyos siempre han estado, tanto en los buenos como en los malos momentos, ayudándole a superar todas las adversidades.

Con su familia presente en todo momento, ha dado gracias a todo el mundo pero en especial a ellos, a sus padres, a si mujer y a sus hijos. "Solo me queda decir gracias a todo el mundo y que los quiero mucho".