Nervión se queda huérfano tras el adiós de su leyenda

"Dejo para el final al más importante, a ti, sevillista, que se viste cada día con la pasión, la emoción y la gloria de compartir este sentimiento. Nadie es más grande que vosotros, nadie siente como vosotros, nadie mejor que vosotros para guiarnos a un camino de éxitos, cuánto os voy a echar de menos. Os quiero. Dicen que nunca nos rendimos, por eso mi deseo es que el equipo mantenga mi legado, dadlo todo en cada minuto, compañeros, dignificar esta camiseta y este escudo. Sevillista seré hasta la muerte, os echaré mucho de menos. ¡Viva el Sevilla!", fueron las últimas palabras de un Jesús Navas abrumado y entre lágrimas por todo lo que dejaba atrás, su vida, el Sevilla Fútbol Club y el fútbol que este 30 de diciembre en el Ramón Sánchez-Pizjuán ha visto al palaciego despedirse del verde.

Un acto que comenzó antes de que las gradas se llenaran para despedir a su capitán, con desfile de celebridades por la distinguida alfombra roja que puso el club en la habitual zona mixta. Se pararon a hablar jugadores de talla mundial como el reciente ganador del Balón de Oro, Rodrigo Hernández, otro sevillista y muy amigo suyo como Sergio Ramos, Manuel Pellegrini, que lo tuvo tres años en el Manchester City, Joaquín Sánchez, también amigo del palaciego, y José María del Nido Benavente, su expresidente: "Como sevillista lo único que puedo hacer es sentirme orgulloso de que durante tantos años y con tanto sentimiento, profesionalidad y éxito haya vestido la camiseta del Sevilla".

Jesús Navas: "Llevo la camiseta de Puerta e intento entregarme al máximo en cada partido por él y por Reyes"

Quien no hizo declaraciones fue el presidente de la entidad, José María del Nido Carrasco, que pasó fugazmente y sólo participó en la despedida para otorgarle el XIV 'Dorsal de leyenda' del Sevilla FC con una camiseta conmemorativa por sus 705 partidos en la entidad. Cuando su nombre sonó por megafonía en los compases finales del evento el Sánchez-Pizjuán casi al unísono mostró su disconformidad.

Jesús Navas deja un legado imborrable en el Sevilla FC

Ello fue el preludio hasta que la leyenda, Jesús Navas, apareciera al final y se acordara de dos personas muy importantes en su travesía futbolística, Antonio Puerta y José Antonio Reyes: "Quien lleve el número 16 que lo dé todo con el cariño y la entrega con el que yo lo he llevado". Ya en el césped y arropado junto a Aitor Puerta, hijo de Antonio, y Noelia y Triana, hijas de José Antonio, volvió a incidir en sus figuras como clave en su vida: "Qué decir de vuestros padres, me enseñaron a ser mejor persona, les estaré siempre agradecidos, siempre los llevo en mi corazón, los quiero mucho".

Ese cariño al que hace referencia Navas es el mismo que le profesó su parroquia minutos más tarde para decirle una vez más cuánto lo quieren a él y cuánto van a añorar su entrega diaria al Sevilla, en un acto lleno de sorpresas como la canción que le compuso Javier Labandón, conocido musicalmente como El Arrebato, o el bonito momento vivido con 'La eterna banda del Capitán Veneno' cantando el famoso 'Credo' que compuso su autor, Juan Carlos Aragón Becerra, para el sublime popurrit de 'Los Peregrinos', tercer premio en la final del COAC 2017, y anteriormente uno de los pasodobles más recordados, 'Un amigo es un amigo' de 'Los Condenaos', segundo premio en la final del COAC 2001 y primera comparsa que escribió en su totalidad.

"Hoy cerramos un capítulo. Afortunado de levantar trofeos, compartiendo títulos con mis compañeros pero sigo siendo un tipo sencillo. El nuevo día me va a resultar complicado, por eso quiero agradecer a Pablo Blanco por reclamarme. Para mí, jugar al fútbol es lo máximo, disfruto con ello y por eso he llegado hasta los 39, si no hubiera sido por la cadera habría continuado, dadlo por seguro. No es algo nuevo, acumulaba cuatro años con esta dolencia y honestamente ya no podía más", decía Jesús Navas en su discurso final a la afición antes de escuchar a su estadio corear su nombre, dar una vuelta de honor y escuchar el himno del Centenario cantado en directo por el propio Arrebato.

La Torre del Oro también se rinde ante Jesús Navas

El mundo del fútbol a sus pies rendido como la Torre del Oro, donde se proyectó su cara, la del símbolo del Sevilla Fútbol Club. Nervión se queda huérfano del carácter de un joven de Los Palacios que cambió el futuro de la entidad, pierde un capitán y gana a su mejor aficionado. Como le dijo su padre en Carrusel Deportivo, Francisco Navas, Jesús se marcha sabiendo que ha hecho bien el trabajo: "Todos esos valores que le hemos transmitido los ha llevado con gala. Se quedan en la memoria de la gente una serie de valores que le han acompañado en toda la trayectoria. La sencillez, la humildad, el compañerismo, el no hablar nunca mal de nadie, el hablar siempre bien de sus entrenadores y compañeros. El respeto a lo largo de su vida es algo que cala en la gente. Yo creo que esto lo han percibido".