Trabajos de conservación en el Alcázar

Los alfarjes mudéjares del Real Alcázar lucen restaurados sus casi 700 años de historia

Un equipo de siete restauradores ha trabajado durante ocho meses en un proyecto de 455.000 euros de inversión para la conservación de estos elementos de la galería del Patio de Doncellas

Restauración de los alfarjes del Patio de las Doncellas del Alcázar de Sevilla

Jorge Jiménez

Rafa Aranda

Rafa Aranda

Decenas de turistas hacen cola en la Puerta del León del Real Alcázar para acceder a uno de los lugares más emblemáticos de la ciudad de Sevilla. Desde turistas extranjeros hasta excursiones de colegios. Se estima que entre 5.000 y 7.000 personas visitan diariamente el Alcázar, y a partir de ahora todo aquel que acuda a descubrir las maravillas que esconde este monumento podrá mirar hacia arriba mientras pasea por las galerías del Patio de Doncellas del Palacio Mudéjar Bajo y ver sus alfarjes en perfecto estado de conservación.

Durante ocho meses, un equipo formado por siete restauradores de la empresa Cambium se han esmerado en realizar un profundo trabajo de conservación y restauración de estos alfajares, para lo cual ha sido necesaria una inversión de 455.444 euros. "Han hecho un trabajo magnífico para la recuperación de un enclave singular", ha valorado José Luis Sanz, el alcalde de Sevilla, en el acto de presentación de este miércoles ante los medios de comunicación en el mismo patio.

Sanz ha asegurado que estos elementos son un "testimonio excepcional de arte mudéjar", ya que en ellos se puede ver el paso de los siglos en el Real Alcázar, de casi 700 años de historia. Realmente su cronología no está clara. Se estima que entre 1356 y 1366, aunque ha tenido intervenciones posteriores entre los siglos XVI y XIX. "Hay hipótesis que los sitúan en la época de Pedro I y otras que lo achacan a Carlos I", ha asegurado sobre su origen.

Así ha sido la restauración de los alfarjes

El alcalde hispalense también ha destacado que la restauración ha permitido "conservar, consolidar y respetar el original". Sobre todo, los trabajos en las galerías norte, sur, este y oeste han incidido en la armadura de madera, interviniendo en los elementos constructivos y en los estratos de policromía, y sobre la decoración de los mismos.

Con el paso del tiempo, estos alfarjes han sufrido alteraciones por las distintas modificaciones que ha tenido el espacio y otras intervenciones, por lo que se hacía necesario actuar sobre los mismos.

Alfarjes del Patio de las Doncellas del Alcázar de Sevilla

Alfarjes del Patio de las Doncellas del Alcázar de Sevilla / Jorge Jiménez

Juan Carlos Castro, uno de los restauradores, ha estado presente en el acto en el Patio de Doncellas, y ha destacado que "en gran medida el éxito se debe a un proyecto de intervención previo", siguiendo siempre una metodología y criterios generales que se adaptan "a las leyes nacionales, autonómicas y convenios internacionales de restauración y conservación".

Durante estos trabajos ha "primado el criterio de la mínima intervención", destacando la eliminación depósitos y de la suciedad superficial, la protección de elementos que se pudieran caer, un descombrado del trasdós, pruebas de salubridad, fijación de piezas y fragmentos, retirada de elementos ajenos al original, fijación de la policromía, pruebas de limpieza, tratamiento de restos de capas pictóricas, desinsectación, limpieza de depósitos biológicos y, finalmente, una protección de la superficie.

Patio de las Doncellas del Alcázar de Sevilla

Patio de las Doncellas del Alcázar de Sevilla / Jorge Jiménez

Todo ello con el objetivo de "impedir que las alteraciones del alfarje fueran a más", ha descrito Castro. Por tanto, al mirar al techo de cada galería se puede disfrutar de ya de los alfarjes y escudos con sus detalles y su rica policromía.

Comparación con la Plaza de España

José Luis Sanz también ha aprovechado la ocasión para lamentar que la inversión en el Alcázar no sea similar a la de la Plaza de España. "Ojalá todos los monumentos tuviesen esta capacidad de inversión, ese presupuesto para seguir mejorando rincones. Imagínense si la Plaza de Espala tuviese esa capacidad de inversión para ir mejorándola", ha asegurado.

"La vamos a poner en marcha la propuesta, pero hay quien no la ve. Creo que es necesario que espacios como este tengan inversión para mantenimientos así", ha añadido, pero siempre a la espera de una cita con la ministra de Hacienda, María Jesús Montero. "En los próximos días anunciaremos cosas", ha dejado caer el regidor.

Alfarjes del Patio de las Doncellas del Alcázar de Sevilla

Alfarjes del Patio de las Doncellas del Alcázar de Sevilla / Jorge Jiménez

Por último, ha vuelto a explicar los motivos por los que quiere cerrar bajo pago la Plaza de España: "Si queremos que esté en buen estado para el 29, tiene que tener capacidad de inversión. Quiero cobrar una pequeña entrada para una vigilancia o control y un taller de restauración permanente para tareas de mantenimiento, que hoy en día no es posible".