El Valdés Leal dice 'basta': 17 años después siguen sin comedor y 270 niños almuerzan en caracolas de chapa

Las familias del CEIP Valdés Leal, en el sevillano barrio de Carretera Carmona, han puesto pie en pared... otra vez. Después de 17 años esperando las obras de un comedor escolar que nunca llega, 270 niños y niñas almuerzan cada día en caracolas de chapa prefabricadas que el Ayuntamiento de Sevilla dispuso de manera provisional hace años.

Este lunes, el AMPA del centro y las familias afectadas por la ausencia del necesario comedor escolar han vuelto a manifestarse para exigir a la Junta de Andalucía que ponga remedio a una situación que califican de "insostenible".

"Las caracolas se construyeron hace 12 años, están deterioradas, se inundan cuando llueve, ahora ya hace un calor terrible"... relata Irene, una de las madres afectadas. "Además, ahora no hay baños, por lo que los niños tienen que ir a hacer sus necesidades al aseo del colegio, que está como a 70 u 80 metros de distancia", expone.

Las dos adjudicatarias quebraron

Tras años reclamando el comedor escolar (las reivindicaciones comenzaron en 2007), en 2019 llegó la primera adjudicación. Los trabajos no se iniciaron hasta el año 2020, y a los dos meses de que la empresa adjudicataria empezara los trabajos de medición, quebró. Además, llegó la pandemia de Covid, por lo que la construcción del comedor quedó "en tierra de nadie". "Nadie resolvió el contrato que se había perdido", relata Irene.

Así se llegó hasta el año pasado: "volvimos a movilizarnos, se recuperó el proyecto y conseguimos que volviera a haber una adjudicación", explica esta madre. Esta segunda adjudicación se produjo en julio de 2023 y los trabajos comenzaron en el mes de octubre.

Fue una gran noticia: la consejera de Desarrollo Educativo y Formación Profesional, Patricia del Pozo, y el alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, acudieron al inicio de las obras y a la puesta de la primera piedra, y prometieron que, si todo iba bien, el nuevo comedor escolar estaría listo a comienzos de 2024.

Apenas seis meses después, la segunda empresa también quebró. Y, por el momento, no se conoce la fecha de su reanudación. "En abril nos comunicaron que la nueva empresa también había quebrado. Exigimos a la Junta de Andalucía que las obras se tienen que retomar ya, de forma urgente. Esta situación no se puede dilatar más en el tiempo", zanja Irene, que representa la voz de casi 200 familias afectadas.

El comedor, fundamental para la conciliación

"El comedor tiene una función de conciliación fundamental", desarrolla Irene. "Muchas familias no podemos recoger a nuestros hijos en horario escolar porque estamos trabajando, y tenemos que dejar a los niños allí queramos o no queramos, a pesar de saber en las condiciones que está". "Y nos quedamos preocupados porque los dejamos en unas infraestructuras que están en condiciones lamentables", incide.

Por todo ello, las familias usuarias del servicio se concentraron este lunes 27 de mayo y colocaron de nuevo la pancarta de 25 metros que retiraron hace apenas medio año. "Las familias del colegio exigen a la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía a dar una respuesta inminente a esta situación y a que se reanuden las obras de forma inminente para que estén finalizadas antes de que concluya este año", reza su comunicado.