VISITA CULTURAL

Murillo a la luz de los candiles: una noche para descubrir el hospital sevillano con joyas del Barroco

La visita guiada y nocturna al Hospital de la Caridad sufrirá un parón por obras en los próximo meses, pero todavía hay entradas disponibles durante el mes de septiembre

Visita al Hospital de la Caridad, en la Iglesia de la Caridad con el retablo de Pedro Roldán de fondo.

Visita al Hospital de la Caridad, en la Iglesia de la Caridad con el retablo de Pedro Roldán de fondo. / El Correo

Rocío Soler Coll

Rocío Soler Coll

Un lugar emblemático, una atmosfera tenue, obras de arte originales y simbólicas del Barroco y la historia de un personaje que cambió la riqueza y las comodidades por una vida entregada a la caridad. La visita nocturna bajo la luz de los candiles en el Hospital de la Caridad habla de la vida de Miguel Mañara, un joven sevillano procedente de una familia adinerada del siglo XVII al que la muerte le acompañó hasta el final de sus días. Uno de los principales atractivos de la visita es la riqueza artística que envuelve el lugar, con obras de Bartolomé Esteban Murillo y Juan de Valdés y Pedro Roldán, exponentes del Barroco a nivel mundial.

Fotografía de la obra 'Multiplicación de los panes y los peces' de Murillo en la Iglesia de la Caridad.

Fotografía de la obra 'Multiplicación de los panes y los peces' de Murillo en la Iglesia de la Caridad. / El Correo

Esta visita, que de momento solo tiene entradas a la venta hasta el mes de septiembre, se verá paralizada por obras, aunque todavía se desconoce exactamente cuándo. Como consecuencia de los desprendimientos en el techo de la Iglesia de la Caridad, en el interior del edificio, y la aparición de hasta 300 grietas a causa de las obras llevadas a cabo en las Atarazanas, el edificio tiene que someterse a una restauración que, entre otras cosas, ha provocado la cancelación de más de 60 fechas para parejas que se iban a casar en la Iglesia de la Caridad en 2025.

Por ello, es importante que el interesado en realizar la visita compre las entradas a través de la web de Engranajes Culturales, donde todavía hay entradas en septiembre.

El horario del evento es de 22h a 23,30h y se suele llevar a cabo un día a la semana, normalmente los jueves, los viernes o los sábados. Este edificio histórico está situado en la calle Temprado número 3, cerca del Teatro de la Maestranza, en el Casco Antiguo.

Protagonista de la visita: Venerable Miguel Mañara

Miguel Mañara fue el noveno de 10 hermanos, aunque muy joven tuvo que superar la muerte de varios de sus hermanos, así como la de su padre. Para cuando Mañara cumpliera los 22 años, ya sería huérfano de padre y se habría convertido en uno de los hombres más ricos de la capital andaluza. Miembro de la Orden de Calatrava, se casó con Jerónima María Antonia Carrillo de Mendoza y Castrillo, con quien jamás pudo tener hijos y quien tras contraer una fiebre misteriosa falleció. De nuevo, Mañara tenía que enfrentarse a la muerte y a los duros efectos de la soledad.

Retablo Mayor de Pedro Roldán, de los más destacados del barroco, en la Iglesia de la Caridad.

Retablo Mayor de Pedro Roldán y pintado por Juan de Valdés, de los más destacados del barroco, en la Iglesia de la Caridad. / El Correo

Estuvo apunto de aislarse en un monasterio, pero fue un conocido suyo quien le aconsejó que utilizara su tristeza y su riqueza para ayudar a los demás, especialmente a los más desfavorecidos. Fue precisamente entonces cuando Mañara decidió que la palabra "caridad" cobrara sentido y fuera la protagonista del resto de su vida.

Su historia, su implicación para construir el Hospital de la Caridad, donde se gastó toda su extensa fortuna, y cómo llegó a convertirse en Hermano Mayor de la Hermandad de la Santa Caridad son datos que se conocen a través de la visita nocturna, que se lleva a cabo con un simpático guía y con grupos reducidos, acompañados de la luz de los candiles y el silencio de la noche.

La Iglesia de la Caridad, templo del Barroco

En la vida de Mañara tienen especial protagonismo personajes ilustres de la época y de la historia del arte del siglo XVII, como Bartolomé Esteban Murillo, Juan de Valdés Leal y Pedro Roldán, todos ellos sevillanos y artistas consagrados del Barroco.

Mañara, que venía de una familia acomodada y católica, quiso levantar la Iglesia de la Caridad, que está en el interior del hospital, y envolverla de las obras de los mejores artistas del país. Por ello, recurrió a sus amigos Murillo, Valdés y Roldán, para que se dedicaran en cuerpo y alma para representar en sus obras conceptos como la muerte y el cristianismo.

A día de hoy, la Iglesia sique preservando obras originales de los artistas, aunque también conviven con algunas copias. En ella se pueden contemplar obras originales como Santa Isabel de Hungría curando a los tiñosos y La multiplicación de los panes y los peces de Murillo, o El Retablo Mayor de la Caridad, considerado uno de los mejores retablos del Barroco, hecho por Pedro Roldán y pintado por Juan de Valdés Leal.

La Hermandad de la Santa Caridad

En 1662 Miguel Mañara se convierte en Hermano Mayor de la Hermandad de la Santa Caridad, de la que hizo Hermano Honorífico a Murillo. Esta hermandad, de la que se empieza a tener conocimiento a partir de 1456, se caracteriza, a diferencia del resto de hermandades de la ciudad, por llevar a cabo todas sus actividades de puertas a dentro.

Solo pueden ser hermanos los hombres y la elección del Hermano Mayor, aunque se haga mediante elecciones, siempre tiene el denominador común de la importancia del apellido, puesto que la historia demuestra que el cargo siempre se mueve entre un círculo reducido formado por apellidos de familias acomodadas de la ciudad.

Esta hermandad no recibe fondo públicos y está formada por unos 400 hermanos. Además, no organiza besamanos ni besapiés a los que puedan acceder los vecinos de la ciudad, ni tampoco actos extraordinarios.

Cabe destacar que la vida caritativa de la hermandad sí es muy activa. El Hospital de la Caridad sigue albergando, desde la época de Mañara, la Santa Casa, una residencia donde viven personas en situación de vulnerabilidad. Los hermanos que la conforman tiene estrictas responsabilidades con relación al funcionamiento de la residencia, como "estar de guardia" en meses puntuales. Asimismo, proporcionan comida a 350 familias cada mes.

Con relación a las tradiciones de la Hermandad, cuando un hermano fallece está prohibido venerarlo con flores, puesto que los valores de la Hermandad aseguran que la oración es la única forma de venerar al fallecido.