Los vecinos protestan en el pleno para frenar un "atentado normativo" que da luz verde a más pisos turísticos

El próximo jueves se avecina una mañana de tensión en la Plaza Nueva. Por un lado, el Gobierno de José Luis Sanz pretende sacar adelante la nueva normativa para regular las licencias de pisos turísticos, con el visto bueno de Vox. Y por otro, a las puertas del consistorio, mientras tenga lugar el pleno municipal, la asociación Sevilla Se Muere ha convocado a los sevillanos para una concentración masiva, hartos con la turistificación y "el atentado normativo que se intenta perpetrar contra los ellos y contra la ciudad".

"Pretenden aprobar una normativa que abre la puerta a la concesión de casi 23.000 nuevas licencias por todos los barrios de Sevilla", explica la asociación en Twitter. "Hacemos un llamamiento a los sevillanos para que manifiesten públicamente su desacuerdo", continúa.

Se refieren al acuerdo entre el PP y Vox en el pasado Consejo de Gobierno de la Gerencia de Urbanismo para llevar al pleno del jueves la propuesta definitiva, que mantiene que las viviendas de uso turístico representen como máximo el 10% del parque de alquiler residencial, lo que daría pie a que efectivamente todavía se puedan conceder en torno a 23.000 más en toda la ciudad.

"Sevilla se juega demasiado con esto. No consintamos que nos echen de nuestros barrios, de nuestra ciudad. No permitamos que la conviertan en un decorado irreconocible e invivible para lucro de unos cuantos", concluyen, poniendo como fecha y hora el 17 de octubre a las 10:30 frente al Ayuntamiento.

Puerta abierta a 22.747 licencias más

¿Qué implica que esta ordenanza sea aprobada? Que ya queda fijado un porcentaje de lo que pueden representar las viviendas de uso turístico en los diferentes barrios de la ciudad, un 10% frente al parque de alquiler total. En base a ese criterio, la conclusión que se extraía del utilizado por la Gerencia de Urbanismo era que tanto el Casco Antiguo como el conjunto histórico de Triana estaban saturados casi en su totalidad y no cabía ni una licencia más. Y solo San Julián y Museo permitían un pequeño margen para más pisos turísticos, aunque ahora solo quedan algo más de una veintena para llegar al límite en Museo.

La clave estará en si el efecto llamada que se ha producido hasta ahora se trasladará o se multiplicará en los barrios colindantes a los que se consideran llenos. Por ejemplo, en las zonas de la Macarena (espacio para 3.316 pisos turísticos más), Santa Justa-San Pablo (2.549), o Nervión (1.944) cercanas al Casco Antiguo y con acceso a la estación de tren o paradas del Metro y tranvía, seguiría habiendo disponibilidad para alquilar una vivienda de uso turístico

O en la zona antigua de Los Remedios (965) y parte de Triana (1.317), pegadas a los barrios ya saturados. Otros distritos de la ciudad menos turísticos con espacio hasta superar el 10% establecido serían Bellavista - La Palmera (1.757), Cerro Amate (3.776), Este Alcosa-Torreblanca (4.174), Norte (3.073) y Sur (3.192).

Acuerdo con Vox

Después de múltiples reuniones sin éxito entre los diferentes grupos municipales, finalmente el Partido Popular ha aceptado las condiciones de Vox. Juntos aprobarán en el Consejo de Gobierno de la Gerencia de Urbanismo de este miércoles llevar al pleno de la próxima semana la propuesta para su aprobación definitiva, tras desestimarse las 15 alegaciones recibidas. Con el voto favorable de sus concejales, el documento tendrá luz verde.

Sevilla será la primera ciudad andaluza en aprobar una ordenanza que regule los pisos turísticos, en base al decreto 21/2024 publicado en febrero por la Junta de Andalucía, que daba potestad a los ayuntamientos de la comunidad para tomar medidas ante la proliferación desmedida de estos alojamientos. Y es gracias a que el PP ha dado el visto bueno a que se haga un nuevo informe sobre la situación actual de la ciudad -la propuesta actual ya está basada en uno que la oposición considera desfasado y poco efectivo- y a instar a la Junta de Andalucía a que modifique su decreto para dar más capacidad normativa a los consistorios en función de las especificaciones de cada municipio.