Probablemente es la primera vez que este periódico bautiza a una Virgen sevillana. Después de que El Correo de Andalucía titulara el pasado 9 de junio el reportaje dedicado a la facturación de esta Virgen “Puja mundial por Nuestra Señora del Confinamiento”, la talla empezó a ser llamada así no solo por las decenas de medios de comunicación de todo el país e incluso del extranjero que se interesaron por la historia de esta imagen modelada en directo a través de las redes sociales por su autor, el palaciego Juan Manuel Martín García, durante los casi tres meses de confinamiento que hemos sufrido por la pandemia del coronavirus, sino que incluso las 400 instituciones de 18 países distintos entre parroquias, asociaciones y hermandades que se han postulado para que el autor se la done empezaron a llamarla de esta manera.
Aunque el propio escultor no tenía muy claro al principio qué nombre recibiría la Virgen, ha terminado reconociendo que es la advocación más adecuada para una Virgen nacida en un momento histórico tan relevante como el pasado confinamiento, y en el vídeo promocional que anunciaba estos días su bendición oficial, que tendrá lugar este mediodía, a las 12.30 horas en la iglesia de Los Terceros de Sevilla, la llama ya directamente “Nuestra Señora del Confinamiento”.
Si bien Confinamiento puede chocar como nombre para la Madre de Dios, hay que recordar que entre las advocaciones de María se encuentran sustantivos incluso más extraños, como Virgen del Arrabal, del Castañar, del Cerro, del Monte, del Prado o incluso del Subterráneo. A lo largo de la Historia, la Virgen ha adoptado incluso nombres de continentes, como la Virgen de África, o de elementos de la naturaleza, como Del Hielo, de los Volcanes o del Socavón, o incluso de circunstancias sociopolíticas, como la Virgen del Destierro. En este sentido, cabe recordar que Confinamiento, procedente del latín Confinis, deriva de confín, que remite al último término al que alcanza la vista; de alguna manera, a lo inalcanzable o divino, que es al límite que el cristiano puede llegar con la intercesión de la Virgen María, circunstancia que cobra un sentido más pleno en el momento histórico que nos ha tocado vivir con la pandemia.
La Virgen del Confinamiento será bendecida hoy en el transcurso de una misa presidida a partir de las 12.30 horas por el director espiritual de la Hermandad de la Santa Cena, Juan Antonio Carrera Páramo. En la capilla del Sagrario de este templo sevillano permanecerá la imagen hasta el próximo 27 de septiembre, donde podrá ser venerada de 19.00 a 21.00 horas los días entre semana; de 11.30 a 13.30 los sábados; y de 12.00 a 14.00 los domingos. “Aún no sabemos quién se quedará con la Virgen”, ha aclarado su autor, y ha añadido: “Lo decidiremos una vez que salga de aquí y visite probablemente algún templo de Huelva”.