Confirman la prisión para uno de los detenidos por la Madrugá

«La gravedad de los hechos», «el historial delictivo y el «riesgo de fuga» han sido los argumentos fundamentales que han llevado a la Audiencia Provincial de Sevilla a confirmar la prisión preventiva para uno de los tres detenidos por los sucesos de la Madrugá, rechazando así su recurso. Las magistradas consideran además que existen «indicios que resultan más que corroborados» de su participación en los incidentes de aquella noche.

En un auto, la Sección Primera de la Audiencia Provincial ha rechazado el recurso presentado por la defensa de Miguel Ángel G.V., uno de los tres detenidos que permanece en prisión por un delito de desórdenes públicos, contra el auto del Juzgado de Instrucción número 5 en el que le denegaba la libertad y que venía confirmar el auto de prisión de 14 de abril de 2017 dictado tras la detención. Su abogado alegaba en el recurso de apelación «la existencia de otras medidas menos gravosas y la excepcionalidad de la medida de prisión, así como la inexistencia de pruebas en su contra». Además, el letrado añadía «circunstancias personales como tener arraigo y domicilio conocido».

Sin embargo, la Sección Primera considera que «los indicios» de la participación en los hechos del detenido se acreditan con el «atestado y declaraciones testificales de los agentes de la autoridad quienes han sido oídos en declaración, y han dado una descripción detallada y minuciosa de los hechos». El auto añade que «del atestado inicial resultan indicios racionales de criminalidad en el investigado, indicios que resultan aún más corroborados por el atestado policial ampliatorio de la posible comisión de un delito de desórdenes públicos». En este sentido, las magistradas recuerdan que «tales hechos tienen la consideración de graves y están sancionados con penas de hasta seis años de prisión» y que «existen motivos por los que puede considerarse indiciariamente responsable criminalmente de los mismos al recurrente». Por todo ello concluyen que «existe un riesgo real de fuga».

Igualmente, destacan que el fin perseguido con la prisión es «garantizar la investigación judicial aún en fase inicial, y evitar la reiteración delictiva». Por último, añaden que con esta medida se «garantiza la presencia del investigado en el acto de juicio», una vez que concluya la investigación.

Por estos hechos, la Policía ha detenido a doce personas e investigado a otras tres, aunque solo tres están en prisión. Los tres tienen edades comprendidas entre los 45 y47 años y numerosos antecedentes policiales.