Hace muchos años, en casa, escuchaba hablar a mis padres de «algo» a lo que llamaban «Charco Redondo» y que nunca supe, a ciencia cierta, de lo que se trataba. Eso es lo que me motivó a buscar e investigar y dar con muchas historias personales.
Es una parte perdida de nuestra Historia o que, tal vez, no se quiere mirar a ella. Sea como fuere hoy me dispongo a refrescar esa parte de nuestra cultura y de la humanidad del pueblo sevillano.
Se trataba de un asentamiento donde se daba refugio y amparo a familias que no tenían una vivienda, que no tenían techo y que, en muchas ocasiones se veían en la calle con niños pequeños y con pocos recursos económicos, situaciones que podían ser dramáticas y que resultaron ser una tabla de salvación para muchos.
Igualmente hasta allí acudían personas que se habían quedado sin nada, por un desahucio, por las inundaciones, como la del Tamarguillo u otras causas que implicaban el no tener nada y ser casi “un último recurso”.
Era refugios que funcionaron en Sevilla desde 1961 hasta 1977 y que no sólo era el sitio de «Charco Redondo» sino también había otros espacios habilitados para tal efecto, hasta veinticinco, que eran reutilizados por aquellos que lo necesitaban y que eran, popularmente, llamadas como las «casitas bajas».
El conjunto de «Charco Redondo» se edificó en 1966 y eran alojamientos provisionales para esas personas, en un tránsito que debía conducirles a una casa más estable y en mejores condiciones.
Inicialmente eran habitaciones en las que se había habilitado lonas y colchones, una pequeña habitación y un mínimo «recibidor», todo provisional, sin agua corriente. Como zona secundaria una de lavaderos y aseos así como cocina. Se vivía en precario pero donde se trataba de dar dignidad a la existencia de cada uno máxime en una Sevilla donde se pasaban necesidades y había pobreza.
Hoy «Charco Redondo» no existe, antaño estuvo ubicado pasando el antiguo «Psiquiátrico de Miraflores» y, a buen seguro, son muchos los sevillanos que hoy, con estas líneas, lo recuerdan o que lo acaban de descubrir.
Otras zonas similares en Sevilla fueron las «Casitas Bajas» de 1962 o «La Corchuela» de 1969 entre otras.