Cuatro sevillanos consiguen una de las 59 becas Leonardo que concede la Fundación BBVA
Los afortunados han sido este año Patricia Bernal, para luchar desde la Biología contra una bacteria que amenaza al olivar; Montserrat Hermosín, que investiga sobre la crisis del establecimiento permanente; Begoña Barrera, que estudia la intelectualidad romaní en el siglo XX; y Juan Manuel Busto, que prepara una ópera sobre Bodas de sangre
Cuatro sevillanos han conseguido en esta última convocatoria una de las 59 becas concedidas por la fundación BBVA para investigadores y creadores culturales. Las ayudas, consistentes en 40.000 euros, están destinadas a apoyar proyectos personales de investigadores y creadores culturales en estadios intermedios de sus carreras, que tengan entre 30 y 45 años y que se caractericen por una significativa producción científica, tecnológica o cultural. Tal es el caso, en Sevilla, de la jefa del grupo investigación Ramón y Cajal en el Departamento de Microbiología de la Facultad de Biología, Patricia Bernal Guzmán; de la profesora del Departamento de Derecho Público de la Pablo de Olavide Montserrat Hermosín Álvarez; de la investigadora en el Departamento de Historia Contemporánea de la US Begoña Barrera López; y del compositor y director de orquesta de Los Palacios y Villafranca Juan Manuel Busto Algarín.
Perfiles muy distintos pero que han conseguido colar sus proyectos no solo entre los 59 afortunados que han conseguido finalmente la beca, sino entre las 1.274 solicitudes registradas. “Para mí es un sueño cumplido”, ha dicho Busto Algarín, que precisamente el año pasado llevó una ópera de Falla nada menos que al principal teatro de Taiwán, y ha añadido: “Me estoy dando cuenta de la relevancia de esta beca por la cantidad de teatros que me están llamando desde que se ha hecho público que me la han concedido”. El proyecto de composición de Busto, que se caracteriza por su versatilidad entre el mundo clásico y el flamenco, lleva por título “El flamenco en la ópera como necesidad creativa: Bodas de sangre. Ópera sobre la tragedia rural de Federico García Lorca”.
Por su parte, Patricia Bernal Guzmán, de la Hispalense, ha titulado su proyecto “El superagente de biocontrol Pseudomonas putida KT2440 como medida sostenible de lucha frente a la Xylella fastidiosa, la gran amenaza de nuestro olivar”. Desde el mundo del Derecho en la universidad Pablo de Olavide, Montserrat Hermosín Álvarez va a trabajar “la crisis del establecimiento permanente”, es decir, las sucursales, las oficinas, las fábricas, los talleres e incluso pozos de petróleo, canteras, explotaciones agrícolas o cualquier otro lugar de explotación de cualquier tipo cuya duración exceda los seis meses. Desde presupuestos históricos, y también desde la Universidad de Sevilla, el proyecto de la investigadora Begoña Barrera López presenta un título sugerente: “La intelectualidad romaní en el siglo XX. Nuevos sujetos para antiguos debates”.
Según la fundación BBVA, “el destino específico de cada beca admite una gran flexibilidad, adecuándose a las necesidades concretas de cada proyecto y pudiéndose desarrollar en un plazo temporal de entre 12 y 18 meses”. Estas becas, resueltas por comisiones evaluadoras de incuestionable prestigio, cuentan con una dotación global de 2,2 millones de euros.