El Coliseo recompone su fachada

Hacienda invertirá 230.000 euros en reparar el exterior del inmueble, antaño teatro y hoy sede de la Junta. Los desperfectos se detectaron hace dos años

Iñaki Alonso @alonsopons /
04 sep 2016 / 22:32 h - Actualizado: 05 sep 2016 / 08:04 h.
"Patrimonio","Junta de Andalucía","Hacienda"
  • El Coliseo España se sitúa en el número 38 de la Avenida de la Constitución. / Jose Luis Montero
    El Coliseo España se sitúa en el número 38 de la Avenida de la Constitución. / Jose Luis Montero
  • Desperfecto en el paño de azulejo cerámico.
    Desperfecto en el paño de azulejo cerámico.
  • Roturas en los balaustres de la fachada que da a la Avenida de la Constitución.
    Roturas en los balaustres de la fachada que da a la Avenida de la Constitución.

Soñó ser un cine, pero finalmente echó raíces como teatro en el corazón de la avenida de la Constitución. Así fue desde su nacimiento en 1931 hasta que, en los años 70, su interior fue destruido casi al completo –sólo se salvaron unos murales de Hohenleiter que custodia la Universidad de Sevilla–, en lo que se catalogó como uno de los grandes atentados al patrimonio de Sevilla. El Coliseo España ha visto cómo su interior ha perdido su seña de identidad cultural –ahora es edificio de oficinas de la Delegación de Hacienda–, pero intenta que su fachada, en el número 38 de la Avenida, vuelva a lucir como antaño y como merece una joya arquitectónica declarada Bien de Interés Cultural (BIC).

Y es que, actualmente, el Coliseo está lejos de sus años dorados. Sólo hay que echar un vistazo a la tupida malla que, desde hace tiempo, cubre tanto las balaustradas y la cornisa superior como algunos paños de azulejo decorativo, que se encuentran en un penoso estado de conservación. De hecho, esa malla está ahí colocada para proteger al viandante de desprendimientos. Los desperfectos se detectaron en marzo de 2014 y sólo hizo falta un mes para ejecutar las medidas de seguridad. Pero era sólo un parche para un edificio que pedía a gritos una reparación integral de su fachada. Esa obra, tras dos años de espera, se acometerá ahora, de la mano de la Consejería de Hacienda, que ha sacado a concurso la reparación de la fachada por un importe de 235.384,62 euros. El plazo de presentación de solicitudes expira este martes y, por tanto, si se cumplen los plazos que habitualmente se efectúan en este tipo de contratos licitados por la administración autonómicas, las actuaciones sobre el Coliseo España podrían dar comienzo entre finales de este año y principios del siguiente.

El último diagnóstico realizado refleja «una suciedad generalizada» en las fachadas, con «restos de salpicaduras de cemento, pintura y siliconas, así como acumulación de excrementos de paloma. Pero ese es el mínimo problema detectado. Los técnicos han detectados «problemas de consistencia» en los ladrillos, «movimientos de piezas en vuelos de cornisa», que presentan «riesgos de caída en la vía pública»; o el deterioro de los paños de azulejos, que presentan «fisuras, fracturas y pérdidas de piezas». A eso se suma el estado de las balaustradas que presentan, según el informe, «fracturas en múltiples balaustres»; y de dos cubiertas de la planta segunda donde se «producen embolsamientos de agua bajo las telas asfálticas existentes».

De ahí que los trabajos se centren en la reparación de balaustradas e impermeabilización de cubiertas, arreglos de la cornisa superior y los pináculos de los torreones, la reparación de la cubierta de teja vidriada, los trabajos de carpintería de madera en exteriores, el tratamiento hidrofugante en el ladrillo y cerámica y, por último, la restauración de un paño de azulejo. Las obras, que tendrán un plazo de ejecución de cuatro meses, no afectarán al normal desarrollo de la actividad laboral de los trabajadores del edificio Coliseo, ya que se desarrollarán en el exterior.

Historial con curvas

Esta reparación se suma a un historial de un edificio no exento de sobresaltos. Aunque hace una década que se estableció como sede de la Delegación de Hacienda, sí que ha sufrido varios episodios. Así, fue polémica tanto la adquisición por parte de la Junta de Andalucía, que invirtió 18,5 millones de euros en este inmueble para destinarlo a oficinas, como el propio uso, ya que hubo parte de la sociedad sevillana que reivindicó que el Coliseo España volviera a tener el uso cultural que tenía en sus inicios. Sin embargo, todo eso quedó empequeñecido por el descubrimiento, nada más adquirir el edificio, de que éste estaba recubierto de amianto, un material prohibido en la construcción por sus efectos cancerígenos. Su detección obligó a un proceso de descontaminación que duró dos años, por lo que los funcionarios y técnicos de la Junta de Andalucía no pudieron ocupar el inmueble, obra de los arquitectos José y Aurelio Gómez Millán, hasta junio de 2005.