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El mayor golpe a las falsificaciones

Operación Suela. La Policía Local interviene casi 60.000 zapatillas de imitación, con un valor de más de dos millones, localizadas en varias naves industriales de la capital

28 ene 2017 / 19:02 h - Actualizado: 29 ene 2017 / 08:37 h.
"Policía Local","Contrabando","Policía Nacional","Contrabando y piratería"
  • El delegado de Seguridad, Juan Carlos Cabrera, en la presentación de la Operación Suela. / Fotos: El Correo
    El delegado de Seguridad, Juan Carlos Cabrera, en la presentación de la Operación Suela. / Fotos: El Correo
  • La Policía Local localizó el material en naves industriales.
    La Policía Local localizó el material en naves industriales.
  • Intervinieron casi 60.000 zapatillas falsas.
    Intervinieron casi 60.000 zapatillas falsas.
  • La Operación Jugoma localizó fundas de móviles falsas.
    La Operación Jugoma localizó fundas de móviles falsas.
  • El logo se incluía justo antes de la distribución.
    El logo se incluía justo antes de la distribución.
  • Ropa deportiva, relojes, perfumes o telefonía móvil, en la Operación Pantalla.
    Ropa deportiva, relojes, perfumes o telefonía móvil, en la Operación Pantalla.

Mazazo a las falsificaciones. La Operación Suela, desarrollada por la Policía Local en dos fases, destapó todo un entramado que distribuía zapatillas de imitación no solo en Sevilla si no en otras ciudades de Andalucía, Extremadura y parte de Ciudad Real, por lo que se la considera la mayor intervención contra la falsificación de estos productos en entorno urbano del país y una de las de más relevancia de las desarrolladas en Sevilla.

Más de dos millones de euros en el mercado es el valor de las casi 60.000 zapatillas falsas (24.000 en una primera fase y 34.500 en la segunda) que los agentes del grupo Fiscal intervinieron entre diciembre de 2016 y enero de este mismo año. La mercancía se distribuía desde una nave central localizada en el Polígono Aeropuerto a otros nueve locales, todos ubicados en un polígono industrial de la capital hispalense. Los materiales se movían a los centros de distribución sin ningún tipo de logotipo, que se añadía al producto justo antes de llegar al consumidor final. De esta manera se superaban los posibles controles previos. La falsificación de la marca se realizaba a través de la imprimación de los logos en espacios previamente diseñados, permitiendo un resultado muy similar al original. Un modus operandi inédito hasta la fecha que se puso al descubierto gracias a la labor de estos agentes.

La investigación comenzó con una inspección rutinaria de las que estos agentes del grupo Fiscal realizan a diario a una de las naves. Los policías iniciaron entonces las pesquisas para determinar la legalidad de los productos, que imitaban a la perfección el diseño de las zapatillas originales a falta del logo, algo que también es delito. Constatado que se trataba de un producto protegido como diseño industrial, se intervino en las primeras nueve naves localizadas como centros de distribución, ubicadas un mismo polígono industrial para lo que se desarrolló un operativo simultáneo en el que intervino el grupo Fiscal, Medio Ambiente y el apoyo de otras unidades de la Policía Local. En esta primera fase los agentes intervinieron 24.000 zapatillas falsas y pusieron a disposición judicial a nueve personas.

Pero las investigaciones de los miembros del grupo Fiscal llevaron a la conclusión de que todo el material intervenido podría proceder de un centro de distribución. Fue así como se inició la segunda fase de la operación que acabó con la localización de este enclave en una inspección a dos naves industriales localizadas en el Polígono Aeropuerto. Una décima persona a disposición judicial y otras 34.500 zapatillas falsas fue el balance de esta intervención.

Fue el volumen de mercancía localizada lo que llevó a los agentes a concluir que la distribución del producto se hacía no solo en Sevilla sino en otras localidades andaluzas, Extremadura y hasta Ciudad Real.

530 actuaciones en 2016

Pero esta no es la única operación contra el contrabando y la piratería que ha realizado la Policía Local. De hecho, 2016 se cerró con 530 actuaciones llegando a intervenir un total de 66.000 artículos, que hubiesen alcanzado un valor de mercado de 1.380.000 euros en el caso de ser comercializados. Pusieron a disposición judicial a 44 personas e interceptaron 14 vehículos. En total son 115 las marcas que se han visto perjudicadas.

Aunque las inspecciones son rutinarias, suele ser en los periodos de regalos (Navidad, San Valentín...) cuando más intervenciones se realizan. En diciembre se desarrolló también la Operación Jugoma, que se mantiene abierta, en la que se incautaron 13.000 objetos falsificados de distinto tipo (soportes audiovisuales, zapatillas y prendas deportivas, perfumes de imitación e incluso una máquina de impresión gráfica para fundas de móviles) con un valor de mercado que ronda los 80.000 euros. También ropa deportiva, perfumes y artículos de telefonía móvil se intervinieron en la Operación Pantalla, en cuya primera fase se retiraron de la circulación unos 20.000 artículos cuyo valor de venta real, en caso de no ser falsificados, ascendería a los 600.000 euros.

Los seis miembros del grupo Fiscal de la Policía Local de Sevilla llevan desarrollando su labor desde hace más de 16 años. Algunos de ellos comenzaron en la época en la que era habitual la venta de tabaco ilegal en los semáforos. La distribución en la capital era tal, que fue necesaria la intervención de todos los cuerpos. Desde entonces han visto evolucionar los métodos para introducir los productos así como la perfección progresiva en las falsificaciones. «Pasamos de ver un pantalón normal con una pegatina de una marca a casi no poder distinguirlos», explica uno de los agentes. Por ello recuerdan el peligro de comprar este tipo de mercancía. «Se trata de productos baratos precisamente porque se saltan pasos que garantizan la calidad y seguridad para el consumidor», explican. Por ello, todo el material que se interviene es custodiado en un depósito municipal hasta que el juez dictamina que debe ser destruido.