Coronavirus

El negacionismo y la desesperación tras casi un año de pandemia

A dos meses de completar el primer año con el coronavirus como nuevo individuo a nivel mundial, aun se pueden palpar diferentes opiniones al respecto, algo que se suma a las también emergentes necesidades que pasa gran parte de la población.

Carmen Osuna CarmenOsunaG /
14 ene 2021 / 11:42 h - Actualizado: 14 ene 2021 / 11:43 h.
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  • El negacionismo y la desesperación tras casi un año de pandemia

Los medios de comunicación y, por consiguiente, las redes sociales, han sido claves en la repercusión de esta pandemia que ha zarandeado al país y al mundo entero. Parte de esa hipótesis tan palpable y objetiva se ha podido apreciar en las opiniones de Twitter durante estos diez meses exactos en el día de hoy.

En tiempos como estos, tras la gran crisis económica que inevitablemente ha dejado el coronavirus, hay quien muestra su desesperación en busca de ayuda. Ya hay quien no pide dinero ni comida, sino trabajo “de lo que sea” apunta Antonio en su pequeña libreta, un hombre de Alhaurín de la Torre que se encontraba en la puerta del Lidl del municipio buscando auxilio. Después de más de 92 millones de casos positivos y de casi 2 millones de muertos en el mundo de los que 53.000 son personas fallecidas en España, la existencia de los negacionistas, aunque minoritaria, aún no ha desaparecido, algo que ha hecho que la “influencer” Marina Yers, sea hoy Trending Toppic y no muy positivamente.

El negacionismo y la desesperación tras casi un año de pandemia

Esta joven youtuber e influencer que habla normalmente sobre modelaje en sus vídeos, y que se hizo famosa por un vídeo que compartió en 2017 sobre un centro de menores, hoy lo ha conseguido por compartir su opinión sobre el uso de la mascarilla.

“Qué problema tenéis con que no me la quiera poner. Es problema mío, me contagio yo” o afirmaciones como “a mi madre le da igual porque no cree en el coronavirus y yo tampoco me creo a los medios de comunicación”, ha desatado las opiniones de un mar de usuarios de esta red social que destaca por la indignación al respecto de todos ellos. Algunos la tachan de irresponsable, otros de irrespetuosa y otros la llaman hasta imbécil. Datos que muestran, irremediablemente, la impotencia de aquellos que son conscientes y tratan todos los días con este virus para el que miles de sanitarios, se están dejando la piel y la vida y para aquellos que a causa de la situación, no tienen qué llevarse a la boca.