El Parque del Alamillo sopesa retirar o mantener 28 naranjos secos

Un equipo técnico valorará en los próximos días si retira o mantiene los 28 ejemplares, que se han secado en los últimos meses a consecuencia de la falta de lluvias

02 dic 2019 / 17:50 h - Actualizado: 02 dic 2019 / 17:55 h.
  • El Parque del Alamillo sopesa retirar o mantener 28 naranjos secos

El Parque del Alamillo pondrá en marcha en las próximas semanas un plan de regeneración del arbolado en el Naranjal de la Dársena. En esta zona del parque se están practicando análisis técnicos a los naranjos más afectados por la seca registrada en los últimos meses, para saber si son recuperables o hay que proceder a su retirada.

El equipo técnico encargado de ese trabajo valorará en los próximos días si retira o mantiene los 28 ejemplares de naranjos, amargos y dulces, que se han secado en los últimos meses, como consecuencia de la falta de lluvias de este año y de algunos problemas surgidos durante el verano en los sistemas de riego.

En función de cómo evolucionen estos naranjos en los próximos días, tras las últimas lluvias registradas, se tomará una decisión, dejando crecer en su lugar especies autóctonas que han ido surgiendo en un proceso de regeneración natural, las cuales necesitan menos mantenimiento hídrico. Los ejemplares secos constituyen el 0,32 por ciento de los 8.789 naranjos contabilizados en el Parque del Alamillo, según precisa la Junta como gestora del recinto.

Los árboles que se han secado suman 28, de dos especies diferentes, thomson y amargo, y se localizan en la zona conocida como el Naranjal de la Dársena, una extensión de 22 hectáreas en la que conviven en torno a 4.000 naranjos de distintas especies, amargos, dulces y mandarinos. Junto a este naranjal, existe otro, de 13 hectáreas de superficie, conocido como el Naranjal de la Cartuja, donde se encuentran otros aproximadamente 4.000 árboles que no presentan problema ninguno, mientras que el resto de ejemplares, hasta el total contabilizado en el parque, se localiza en la pradera situada frente al Cortijo del Alamillo y también están en buen estado. La superficie total de naranjos supera las 35 hectáreas.

La única zona en la que se han detectado algunos problemas es la Dársena, donde se encuentran los 28 ejemplares que aparentan estar secos, pero que en opinión de los técnicos del parque cabe la posibilidad de que se recuperen tras recibir las lluvias de noviembre y el aporte de minerales que facilitan estas precipitaciones. De hecho, el millar de naranjos de la Dársena que en las últimas semanas presentaban algunos síntomas leves de sequedad, ahora muestran señales de plena recuperación, por lo que no es descartable que los 28 más afectados o parte de ellos también logren recuperarse.

En el naranjal de la Dársena han confluido dos situaciones adversas. Por una parte, la escasez de precipitaciones durante la primavera, el verano y la primera parte del otoño, que sólo han alcanzado 14 litros por metro cuadrado desde el 26 de abril. Y por otro lado, el problema técnico acaecido durante el verano en el sistema de riego de esta zona del parque, que obligó a sustituir la bomba y la tubería que impulsan el agua desde el pozo que alimenta el naranjal. Ambas circunstancias han provocado los síntomas de decaimiento en parte de los naranjos que, sin embargo, se están recuperando tras las últimas lluvias.

Si finalmente los técnicos del parque consideran necesaria la retirada de estos 28 ejemplares, porque no puedan recuperarse con el aporte de agua y minerales de los últimos días, se acometerá la sustitución de los naranjos por especies que requieren menos agua, como acebuches, moreras, almeces o álamos, en las próximas semanas. Esta tarea consistirá en quitar los naranjos perjudicados para que, con ello, crezcan con más facilidad los árboles que han ido surgiendo en el lugar en un proceso de regeneración natural.