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La pérgola que unirá la Pelli con el río tendrá casi 300 metros de largo y 20 de ancho, por cinco de alto. / El Correo -
Vista del puente del Cristo de la Expiración, desde la margen derecha, al pie de la Torre Schindler. / El Correo -
Los 40.000 metros cuadrados que la ciudad le ganará como pulmón verde al espacio situado junto al complejo de la Torre Pelli se podrán disfrutar a partir de la próxima primavera. Esa es la idea con la que trabaja Caixabank que ya ha sacado a concurso las obras de este espacio, que se comenzará a construir el próximo mes de agosto. Son las previsiones con las que trabaja su diseñador, el arquitecto Guillermo Vázquez Consuegra, quien destaca la «importancia» de este espacio que pretende recuperar y vertebrar toda la orilla del río desde el puente del Alamillo hasta el de Triana y atraer al visitante hacia un nueva zona con diferentes espacios culturales y museos.
Será un paseo fluvial que contará con un «jardín ecológico con todas las innovaciones a este respecto», explicó Vázquez Consuegra a este periódico. Su diseño, del que dice estar «muy satisfecho porque es un proyecto que va a cambiar la fisonomía de la ciudad», es muy innovador por su «distribución del verde en base a una serie de elipses que van organizándose en islotes verdes unidos por caminos que van desde la Torre Pelli hasta el río». Un espacio que también contará con zonas de césped en las que poder sentarse bajo el arbolado. De hecho, según los datos que constan en el proyecto, este nuevo parque contará con 358 árboles de 14 especies distintas, de los que 227 ya existen en la zona «desde la Expo 92 y que se van a mantener». A estos se añadirán otros 90 nuevos (de tres especies distintas) y 41 que en la actualidad están en un vivero al que fueron trasladados en su día para poder ejecutar las obras en el entorno de la Pelli.
Además, se dispondrán un total de 41 plantas y 442 arbustos, incluidas las buganvillas y las bignonias que se distribuirán en la extensa pérgola de casi 300 metros de longitud, 20 metros de ancho y cinco de alto que se colocará en el perímetro del parque. «Se trata de un umbráculo, que será el espacio más urbano en esta zona verde arbolada», indicó el arquitecto.
La idea es que esta gran pérgola discurra por la avenida del Descubrimiento, la nueva vía abierta entre la Torre Pelli y el Pabellón de la Navegación, de tal forma «que será la línea que separe el tráfico rodado del parque». Será una zona «en la que se podrán instalar quioscos y bares», aunque este uso aún no está cerrado por parte de la promotora, la sociedad Puerto de Triana, que invertirá 2,5 millones de euros en el proyecto.
Para ejecutar este proyecto será necesario «demoler todas las construcciones», muchas de ellas heredadas de la Expo, de la zona como el muro que ahora separa la orilla del río del solar que se utiliza como aparcamiento, que desaparecerá para poder acoger el nuevo espacio verde. Entre estas construcciones se encuentra el centro de remo municipal que se ubica muy próximo al puente de El Cachorro, cuyas nuevas instalaciones «se trasladarán junto al Pabellón de la Navegación para agrupar así todas las construcciones en una misma zona». El nuevo centro tendrá 420 metros cuadrados y quedará completamente integrado en el espacio verde, ya que al ser una zona en pendiente, se aprovechará el desnivel y las distintas cotas de altura para que quede recubierto por el jardín.
Para regar todo este parque no solo se utilizará el riego por goteo, sino que, según indicó Vázquez Consuegra, «se va a aprovechar el desnivel y las elipses» para recoger el agua de lluvia, «de tal forma que no acabe en el río». Un sistema innovador que harán de este «jardín un espacio ecológico». En total, serán 16.000 metros cuadrados de parterre verde arbolado, equipados con 22 bancos (cuatro de ellos con mesas y 12 curvos) y 108 farolas con led. Además, se dispondrá de 520 metros de carril bici que conectarán el puente del Cachorro, con el de la Navegación, pasando por la avenida de los Descubrimientos.