La comisión ejecutiva de la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Sevilla ha aprobado este miércoles una licencia para obras de reforma en el edificio del emblemático Cine Alameda para su transformación en un hotel de cuatro estrellas, después de que los antiguos propietarios del inmueble acordasen la venta del mismo a los promotores del citado hotel.
En concreto, el acuerdo aprobado por la Gerencia de Urbanismo, recogido por Europa Press, implica la autorización de "obras de reforma del edificio existente destinado a uso dotacional cultural, multicines, adecuando su uso al de terciario hotelero de cuatro estrellas", incluyendo además un restaurante en la planta baja, piscinas en la planta baja y azotea y un aparcamiento y otras instalaciones en el sótano.
En paralelo, fuentes municipales han precisado a Europa Press que dado que el edificio está considerado como "fuera de ordenación", el proyecto de reforma del mismo no plantea obras de ampliación que supongan un aumento de la edificabilidad, proponiendo por el contrario una reducción de la volumetría de la edificación para reducir el impacto visual y "mejorar su integración en el entorno" de la Alameda de Hércules.
Para ello, se eliminará la última planta, que se encuentra retranqueada respecto a fachada, y la cubierta técnica sobre la misma, lo que permite eliminar un volumen significativo de dos plantas con los consecuentes efectos en la imagen del edificio. En compensación, se completará hasta la fachada el nivel denominado entreplanta, eliminando así la doble altura de las salas de cine, incompatible con el uso hostelero ahora autorizado.
El proyecto aprobado abarca también al edificio correspondiente al número 12 de la Alameda de Hércules, contiguo al cine, calificado para usos residenciales y actualmente sin uso.
EL LITIGIO DE LOS CINES
La venta del emblemático y popular Cine Alameda fue consumada después de que en 2014, el Ayuntamiento se viese obligado a modificar la calificación de suelo de interés público y social (SIPS) que regía en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de 2006 para los cines Alameda, Avenida y Cervantes, como consecuencia de las acciones judiciales emprendidas por los dueños de tales fincas.
Y es que tras los correspondientes litigios, el Tribunal Supremo falló en favor de estos propietarios, ordenando que estos edificios dejasen de estar destinados a equipamiento público y social, para recuperar su calificación como meros edificios de "centro histórico", tal y como recogía el Plan General de Ordenación Urbana de 1987.
No obstante, ya en 2018, después de un acuerdo de pleno derivado de una moción promovida en tal sentido por Participa, la Junta de Andalucía inició un procedimiento destinado a declarar como bienes de interés cultural (BIC) el actual cine Cervantes, la antigua sala X de la calle Trajano y el antiguo cine Llorens, a cuenta de su valor histórico, si bien el Cine Alameda ha continuado con la calificación de centro histórico, es decir sin protección, siendo finalmente acordada su venta y transformación en un hotel.
PARTE DE SEVILLA
Ante ello, el concejal de Hábitat Urbano, Cultura y Turismo del Ayuntamiento hispalense, el socialista Antonio Muñoz, lamentaba meses atrás la desaparición del Cine Alameda, recordando que por el mismo han pasado figuras como Sylvia Kristel y a Otto Preminger, en el marco del Festival de Cine Europeo, de Sevilla.
Así, Antonio Muñoz exponía que si bien es cierto que el edificio del Cine Alameda "quizás puede que desde su arquitectura no tenga interés", se trata de "un cine clásico vinculado a la historia de la ciudad" y un activo cultural para el casco histórico, aquejado como no pocas voces avisan del impacto de los excesos de la actividad turística.