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Una de las últimas visitas al interior de la Fábrica de Artillería. / José Luis Montero
El uso cultural de la Fábrica de Artillería no será obra de la Red Creativa La Carpa, después de que el colectivo, a través de un comunicado, haya rechazado la propuesta del Ayuntamiento de dotar de contenido este espacio ya que, a su juicio, el proyecto es «una estrategia de marketing con fines partidistas», además de critica «la falta de presupuesto» para intervenir en el edificio. Un razonamiento, este último, que ha molestado al Gobierno local, que reivindicó que la Fábrica de Artillería es «una de sus prioridades», con 1,2 millones de inversión, y que «se le pueda acusar de cualquier cosa menos de dejadez y de permanecer impasibles».
Esas son las afirmaciones que hizo a este periódico el delegado de Hábitat Urbano, Cultura y Turismo, Antonio Muñoz, tras conocer la decisión y, sobre todo, las valoraciones de La Carpa. El comunicado emitido por esta red creativa cuestiona el enfoque que el Instituto de la Cultura y las Artes de Sevilla (ICAS) quiere otorgar a este espacio, que está «lejos» de conseguir, a su juicio, la deseada «colaboración público-privada (...) donde la creación, formación, innovación y difusión de actividades e iniciativas técnicas, artísticas y sociales se dieran la mano». Así, el escrito lanzado acusa al Consistorio de haberse apropiado de «los principios del proyecto en los que La Carpa lleva 20 meses trabajando».
Y no solo eso. El colectivo cree que el Ayuntamiento ha conseguido «atomizar a los colectivos integrantes de la Red Creativa La Carpa, disgregándolos y paralizando su iniciativa de rehabilitar el Pabellón del siglo XV de la Expo 92 para crear un centro de innovación social, tecnológica y cultural».
De la misma forma, entre las lagunas que ven en la rehabilitación de la Fábrica de Artillería se encuentran, por ejemplo, la falta de presupuesto para acometer el resto de intervenciones que complementarían a la que se está llevando a cabo en la actualidad, esto es, la de consolidación y recuperación de elementos estructurales. Es más, a su juicio, en paralelo a las primeras obras de consolidación, «es necesario dotar de actividad las naves y zonas al aire libre que están en buen estado y no necesitan rehabilitación estructural», como prueba de que los «logros que anuncian cada dos semanas en prensa» no son «inexistentes».
El Ayuntamiento no postula con esas críticas y, además, defiende que no puede abrir espacios sin antes garantizar que se cumplen con «todas las garantías» y que no hay «ninguna patología». Muñoz, además, reivindicó la hoja de ruta marcada de abrir por fases la Fábrica de Artillería, fijando para septiembre las primeras actividades culturales efímeras. A su vez, indicó que el Consistorio está perfilando un plan de usos para ocupar el espacio que está «prácticamente terminado»