El alcalde de Sevilla, el socialista Juan Espadas, y Altadis han alcanzado un acuerdo para desbloquear el uso de los terrenos de la antigua fábrica de tabacos de Los Remedios, que cerró hace 13 años, y que conlleva el desarrollo de un proyecto que convierta el edificio central de talleres y oficinas --el denominado cubo-- en "icono y emblema" de la ciudad, "como el Museo Guggenheim de Bilbao", y el destino público del 85 por ciento de sus 30.000 metros cuadrados de superficie, de los que 10.000 metros cuadrados serán para equipamientos para la ciudad y para el barrio.
Para ello, Altadis tiene un plazo de seis meses para buscar un inversor para el cubo, que tendría uso terciario y una edificabilidad máxima de 26.000 metros cuadrados. Ese inversor también sufragaría el coste del desarrollo de parte de los edificios públicos, concretamente de unos 5.100 metros cuadrados de superficie para equipamientos globales para la ciudad.
Los equipamientos de barrio, cuya definición abordará el Ayuntamiento con los vecinos, se desarrollarán en los edificios de viviendas de ingenieros y personal de mantenimiento, que ocupan unos 4.900 metros cuadrados. Aquí también se mantendrán los usos religiosos y la ocupación y posición en la capilla y los edificios anexos a la misma.
Todo ello se enmarca en una reordenación completa del entorno que genera la apertura de Los Remedios al río con espacios libres, zonas peatonales y áreas de coexistencia, garantizando además la integración de los Jardines de Manuel Ferrand y Álferez Provisional con los espacios libres y zonas verdes.
Varios inversores
De su lado, la directora de Asuntos Corporativos y Legales de Altadis, Rocío Ingelmo, ha explicado que ya hay varios interesados en desarrollar el proyecto de Altadis, que Espadas no descarta que incluya una pasarela peatonal que conecte esta zona con el Muelle de Nueva York y San Telmo, así como un aparcamiento subterráneo.
Tras los seis de plazo de Altadis, el Ayuntamiento cuenta con otros seis meses para analizar las opciones de proyecto planteadas y elegir la que cuente con mayores beneficios para la ciudad, dando asimismo inicio a la tramitación urbanística que cambie la actual catalogación de uso industrial por la que finalmente vayan a tener los suelos. "Se cerrará en 2020", ha dicho.
Para Espadas, este acuerdo, que arrancaba en 2018 con la firma de un protocolo de actuación y tiene como base el informe del Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico (IAPH) aprobado por la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico y el proceso de participación desarrollado en marzo de 2019, supone la resolución de "una de las que se pensaba que era una causa perdida de la ciudad, algo que se ha hecho con voluntad y trabajo".
Además, afirma que procurará una importante transformación a la zona "respetando el conjunto fabril y el consenso social" y "reinventando y reutilizando los edificios" frente al proyecto de 2015 de gobierno de Juan Ignacio Zoido (PP), centrado en "derribar y construir". En este sentido, recuerda que incluso el nuevo proyecto reducirá la edificabilidad terciaria en alrededor d un 30 por ciento, pasando de 39.000 metros cuadrados planteados por Zoido a 26.000 metros cuadrados.
Altadis, sobre el acuerdo con Zoido: "No fueron las formas"
El convenio firmado por el anterior gobierno de Juan Ignacio Zoido (PP) "no generaba a la ciudad todo el beneficio posible, por lo que se inició otra negociación", incide Espadas. "Ahora se ha sacado un beneficio mucho mayor y más positivo y sin que la propiedad pierda", afirma, destacando el respaldo que habrá de tener de forma mayoritaria por la corporación en el consejo de administración de la Gerencia de Urbanismo y en el Pleno para su desarrollo.
Al hilo de ello, la responsable de Altadis ha asegurado que la empresa está ilusionada por ver el avance tras el primer documento firmado con el gobierno socialista en 2018 y tras "once años de conversaciones". Considera que este acuerdo es "mejor" que el alcanzado con el gobierno del PP, teniendo en cuenta que "no fueron las formas que tenían que haberse seguido porque era un acuerdo sólo de ese equipo de gobierno y la compañía".
"El actual proyecto generará un valor añadido en la ciudad", recalca Ingelmo, dejando claro que la compañía cumplirá con todas las expectativas puestas en ella y destacando su involucramiento con el proyecto.
En ese sentido, el concejal delegado de Hábitat Urbano, Antonio Muñoz (PSOE), ya se ha reunido con el resto de partidos para plantear el proyecto, sin encontrar en ellos "grandes reservas o rechazos" para este "proyecto singular, potente y con marca propia", según Espadas.