Las familias son el patito feo

La administración no presta atención a los cuidadores, que se sienten muy solos

10 oct 2016 / 17:56 h - Actualizado: 10 oct 2016 / 18:04 h.
"Salud","Objetivo: salud mental"
  • Suelta de globos en el Parlamento de Andalucía en un acto que las asociaciones organizaron para visibilizar el problema de la salud mental. / El Correo
    Suelta de globos en el Parlamento de Andalucía en un acto que las asociaciones organizaron para visibilizar el problema de la salud mental. / El Correo

Las familias que tienen seres queridos con problemas de salud mental se sienten abandonadas por la administración. «A los cuidadores no les cuida nadie», con esta frase tan contundente se expresa el presidente de la Asociación en Defensa de la Atención a los Trastornos de la Personalidad (Avance), Gerardo Beotas López, una entidad que nació en 2002 para cubrir este hueco y también para prestar ayuda a los enfermos.

Beotas también se lamenta de que en Andalucía hay aproximadamente 700.000 enfermos mentales, pero la atención en hospitales de día y en comunidades terapéuticas solo llega a unas 400 personas, el resto, según el presidente de Avance, son atendidos en los centros de salud o en las unidades de salud mental, donde cuentan con pocos profesionales. Se queja de que el psicólogo o el psiquiatra ve a cada paciente cada tres meses y lo que aún es peor «es que se han dado casos de que se han anulado citas de imprevisto y sin dar otra alternativa ».

A pesar de estas carencias, admite que los profesionales son buenos y que la actitud de la administración con las asociaciones está mejorando, «nos escucha más y van a contar con nosotros para trabajar en el tercer Plan Integral de Salud Mental (Pisma)».

Respecto a los apoyos económicos externos que recibe Avance, Beotas reconoce la ayuda del Ayuntamiento de Sevilla que ha cedido a la asociación un espacio en el centro cívico El Esqueleto para poder trabajar y realizar sus actividades y también elogia el respaldo de la Consejería de Igualdad y Políticas Sociales de la Junta de Andalucía. Además de estas dos administraciones, Avance también recibe aportaciones de la Consejería de Salud, del IRPF, de la Fundación La Caixa Obra Social, de la Fundación Andaluza para la Integración Social de las Personas con Enfermedad Mental (Faisem), de la Fundación Andrés Villacieros y de la Fundación Cajasol.

Gracias a estas ayudas, la asociación cuenta un amplio programa de actividades que se divide en cinco áreas: de información y asesoramiento; de rehabilitación psicosocial, en la que se incluyen varios programas para entrenar en las habilidades sociales y de la vida cotidiana y en el autocuidado y autonomía personal, además de talleres de cocina, prensa y creación literaria de baile y se organizan actividades de ocio y tiempo libre; de empleo, en la que se orienta para la integración laboral y se entrena en habilidades prelaborales; de atención al cuidador, con una escuela de familias, un punto de encuentro familiar y actividades de respiro familiar; la quinta y última área es la de acompañamiento domiciliario, que consiste en visitas domiciliarias de un psicólogo para acercar el dispositivo sanitario a personas que se han desvinculado de él por el objetivo de reintegrarlas a la terapia.

Beotas manifiesta que con estos programas atiende a unas 300 personas. Además, recalca que hay que visibilizar el problema de la salud mental, «porque no tiene nada que ver con la violencia o la delincuencia».

Otra entidad que nació para dar respuesta a las necesidades y demandas de las personas con problemas de salud mental y a sus familias es la Asociación de Familiares, Allegados y Personas con Enfermedad Mental (Asaenes). Esta nació hace 30 años y a pesar de su lucha, esta entidad se queja de que aún queda un largo recorrido para que el colectivo cuente con recursos suficientes y para que la participación social sea real y efectiva.

Asaenes, al igual que Avance, también presta mucha atención a las familias con la organización de programas de orientación, formación y autoayuda. En concreto, para las personas con problemas se organizan talleres ocupacionales y programas de atención domiciliaria y acompañamiento.

Esta asociación también presta ayuda a los menores que conviven con este tipo de problemática y a personas con problemas graves de salud mental que carecen de hogar.

Además de ser un apoyo importante para las familias y las personas con problemas de salud mental, Asaenes lucha con fuerza para acabar con los falsos mitos organizando diferentes actividades en el ámbito cultural como el Festival de Cortos CineMental que organiza junto a los hospitales Virgen del Rocío y Virgen Macarena.

Aunque la administración no presta ayuda alguna a las familias y la que da a las personas con problemas de salud mental son más bien escasas, según las asociaciones, esta sí tiene una red de centros donde se ofrece atención especializada. Además, cuenta con la Fundación Pública Andaluza para la Integración Social de Personas con Enfermedad Mental (Faisem), que cuenta con 1.600 profesionales que atienden a unas 10.000 personas.