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Piraguas en el club Mercantil. / El Correo
Existen en el barrio de los Remedios tres clubes sociales y deportivos que cuentan con cerca de 30.000 socios entre los tres y que se han constituido en una peculiar forma de aprovechar su cercanía con el río. Son el Real Círculo de Labradores, el Club Náutico de Sevilla, y el Círculo Mercantil e Industrial de Sevilla. «Nuestra vida ronda el río», resume el presidente del Mercantil, Práxedes Sánchez, que destaca lo mucho que se disfruta su terraza, envidiable balcón sobre el Guadalquivir.
En el ámbito deportivo, el piragüismo y el remo, que tantos deportistas de primer nivel han dado y dan en Sevilla, no se entenderían sin estos clubes. El Mercantil, por ejemplo, dispone de instalaciones deportivas en el Guadalquivir desde los años 70. «En nuestro caso, la unión al río se hace sobre todo con el uso del embarcadero, tanto para barcos como para la sección de piragua, que ha dado deportistas olímpicos», explica Sánchez, que destaca además que los tres clubes «aportan un valor a la ciudad», que en el caso de Labradores y Náutico incluye también equipo de remo. El Centro de Alto Rendimiento de la Cartuja tiene usuarios de un perfil diferente, puesto que se emplea en competiciones o lo utilizan entidades deportivas.
La relación entre los tres clubes es «magnífica», destaca el presidente del Mercantil, que en estos momentos ostenta también la presidencia del foro FISE, una plataforma integrada por los principales Clubes Deportivos privados de la capital y la provincia en la que se incluyen los tres vecinos de Los Remedios.
El Mercantil, que concluyó la renovación de sus instalaciones el año pasado, tiene todavía otro proyecto que podría incrementar su relación con el río: la ampliación física del club con el espacio que en la actualidad ocupa un aparcamiento en superficie en terrenos que pertenecen a la autoridad portuaria, propietaria también del suelo sobre el que se edifican los clubes.
Lo cuenta Práxedes Sánchez. «En el caso del Mercantil, hemos tenido una petición desde hace muchísimos años: ampliar la concesión con los terrenos del aparcamiento que está al lado». De manera que la petición no es nueva, y tampoco existen indicios que indiquen que se hará realidad en breve, pero el proyecto sigue ahí, apoyado también en que la calificación en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de los terrenos que pretende el club es de zona verde deportiva. «Pero sí nos gustaría», admite el presidente del Mercantil, que tiene claro cuál sería la principal utilidad de ese deseado nuevo espacio, que completaría su oferta deportiva: «El proyecto que nos gustaría sería una escuela de Vela».
Lo que no acaba de funcionar es lo que los socios del Mercantil ven desde su terraza: la zona del Muelle de las Delicias. «La oferta que hay enfrente es espectacular, es una zona que hay que desarrollar», opina Práxedes Sánchez, que espera un futuro mejor para ese espacio.