Los nacimientos viven en Sevilla sus horas más bajas en 42 años

Desde 2008 a 2017 la cifra de alumbramientos ha descendido un 29%

19 jun 2018 / 20:00 h - Actualizado: 20 jun 2018 / 11:24 h.
"Demografía","Natalidad"
  • Una matrona toma la huella dactilar de un recién nacido. / Raúl Sanchidrián (Efe)
    Una matrona toma la huella dactilar de un recién nacido. / Raúl Sanchidrián (Efe)

Desde el año 1975, el primero del que constan registros provinciales, no se había producido una cifra tan baja de nacimientos en Sevilla. En 2017 se registraron un total de 17.819 alumbramientos, en los que predominaron –por muy poco, eso sí– los varones, con 9.198 niños, frente a 8.621 niñas (51,61 por ciento frente a 48,38), según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Hay que remontarse a la década de los 90 para encontrar el anterior registro más bajo de partos en Sevilla, concretamente hasta el año 1996, cuando se dieron a luz 18.144 bebés, la menor cifra en los últimos 42 años. Hasta ahora.

La tendencia a la baja de la cifra de nacimientos suma así cuatro años consecutivos. En 2017 el descenso fue del 6,4 por ciento en comparación con 2016 (cuando se produjeron 19.035). 2014 fue la excepción, si bien ese año apenas nacieron 135 bebés más que en 2013. Con esa salvedad, la cuesta abajo de alumbramientos se agravó coincidiendo con el inicio de la crisis económica, pues en 2008 se contabilizaron 25.193 recién nacidos. Ese año, 2008, supuso un punto de inflexión porque hasta entonces la provincia había vivido ocho años de repunte de recién nacidos.

Desde entonces, el retroceso alcanzado en Sevilla en la última década es del 29,3 por ciento. Si nos retrotraemos hasta 1975, hoy nacen prácticamente la mitad de niños que hace 42 años (30.447 nacieron aquel año).

La crisis, además de traducirse en un descenso de la natalidad, ha tenido también su reflejo en la edad a la que las sevillanas tienen hijos, que continúa aumentando. Además, siguiendo la misma tónica, la cifra de vástagos por mujer bajó hasta los 1,37 hijos al cierre de 2017 frente a los 1,42 de un año antes. Según el INE, la edad media roza ya los 32 años (31,97) en Sevilla, cuando en 2016 era de 31,85. Sin embargo, si hablamos del estreno de la maternidad, las sevillanas lo tuvieron a los 30,6 años (al igual que en 2016), mientras que el segundo llegó a los 33,22 años, el tercero a los 34,04 años y el cuarto en adelante, a los 34,33 años de media, señalan las estadísticas. Como curiosidad, uno de cada dos bebés nacidos el año pasado fue el primer hijo para sus padres (49,8 por ciento), el 38,3 por ciento fueron los segundos hermanos, mientras que el 9,2 por ciento de las madres trajo al mundo a su tercer retoño y un 2,66 por ciento de los bebés ocuparon el cuarto (o incluso posiciones más elevadas) lugar en la nómina de hermanos.

La tasa bruta de natalidad se situó así en la provincia en 9,16 bebés por cada mil habitantes, la menor de la serie histórica, con un retroceso del 6,5 por ciento respecto a 2016. Es, sin embargo, un poco más elevada que la del conjunto nacional (8,37). Y, mientras que en 1975 solo el 1,6 por ciento de las mujeres que fueron madres no estaban casadas, en 2016 –último ejercicio con datos– casi una de cada dos (el 47,15 por ciento) no tenía ese vínculo al estrenar la maternidad, la tasa más alta de la serie histórica.

Por su parte, en 2017 se produjeron 16.226 defunciones en la provincia, una cifra equiparada entre hombres y mujeres, con 8.128 y 8.098 fallecimientos, respectivamente. Se trata de un volumen superior al contabilizado en 2016 –cuando se registraron 15.341 muertes–, lo que supone un incremento interanual del 5,76 por ciento más. Con estos datos, la provincia cierra 2017 con un saldo vegetativo positivo (más nacimientos que defunciones). Nacer en la provincia de Sevilla supone, según las estadísticas, contar con una esperanza de vida de 81,4 años (levemente inferior, en un 0,36 por ciento, a la de 2016). Claro que si se es varón ésta desciende hasta los 78,6 años, mientras que si se es mujer las expectativas se elevan hasta los 84,07 años.

Y en España

El número de nacimientos en España en 2017 es el más bajo desde 1999, mientras que el de defunciones es el más alto desde 1976. De hecho, España registra más defunciones que nacimientos por tercer año consecutivo. Además, tiene un saldo vegetativo negativo de 31.245 personas, algo que ocurre por segunda vez en la última década pero de forma mucho más pronunciada. La primera vez fue en 2015, aunque con 1.976 muertes más.