Los que pasen habitualmente por la Carretera de Carmona se habrán percatado de la instalación de unas cajas en las aceras con unos cables que cruzan la calzada. Estas cajas estaban instaladas, porque desaparecieron a principios de la semana pasada, a la altura del cruce con la calle San Juan Bosco, Avenida alcalde Manuel del Valle y la Avenida de la Salle.
Estas instalaciones, que se reproducen en otros puntos de la ciudad, no son más que aforos de tráfico. Sirven para saber el volumen de vehículos que soportan esas vías. En algunos sitios de la ciudad no hace falta instalar estos cables, pues se emplean las cámaras que están sobre los semáforos o incluso personal que cuenta los coches y motocicletas que circulan por ese lugar.
En esta ocasión, en la Carretera de Carmona han instalado unas gomas que cruzan la carretera.
Cabe recordar que, en el hipotético caso que se empezase a construir la línea 3 de metro que discurre por la Ronda de Capuchinos, María Auxiliadora y así hasta llegar al Prado de San Sebastían, la Carretera de Carmona, una vía ya saturada por el tráfico en hora punta, asumiría aún más volumen de vehículos y estos datos serían muy importantes para hacer una primera aproximación.
De momento, sólo se trata de un control rutinario como tantos otros que hace el Ayuntamiento.