Más de 600 trabajadores de Abengoa y de sus filiales se han manifestado en Sevilla para reclamar a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) que autorice este martes, en la reunión de su consejo rector, la ayuda de 249 millones para salvar a esta compañía de ingeniería andaluza.
Los trabajadores han partido desde San Telmo -sede de la Presidencia de la Junta- hasta la subdelegación del Gobierno en Sevilla, en el marco de las protestas que retomaron el pasado 8 de junio con el objetivo de presionar a la SEPI para que autorice dicha ayuda a Abengoa, en concurso de acreedores, que garantice la viabilidad empresarial y el mantenimiento de unos 11.000 empleos.
Además, hoy tenían previsto iniciar un encierro de delegados sindicales en Palmas Altas -sede de Abengoa en Sevilla- pero se ha suspendido porque ahora es propiedad de la Junta, que no ha autorizado el encierro por motivos de seguridad, ha informado Laura Rodríguez, representante del comité de Abengoa Energía.
No obstante, los comités han decidido llevar a cabo concentraciones diarias desde mañana en todos los centros de Abengoa en España y fuera del país; y el 21 de junio, aunque está pendiente de autorización, tienen convocada una concentración ante la sede de la SEPI en Madrid.
En la manifestación de este martes han participado trabajadores de las sociedades filiales de Abengoa (Agua, Energía, Solúcar, Inabensa y Abenewco 1) que han emplazado a la SEPI a dar una respuesta positiva «hoy mismo» a la petición de ayuda de Abenewco 1, que aglutina los activos más valiosos y la actividad de la matriz.
El Fondo de Apoyo a la Solvencia de las Empresas Estratégicas se cierra el próximo 30 de junio, cuando finaliza la prórroga de la Comisión Europea al marco temporal de ayudas estatales por la covid.
En este sentido, el dirigente de la federación provincial de industria de la UGT, Manuel Ponce, ha recordado que los trabajadores llevan quince meses esperando soluciones y ha advertido de que el plazo acaba en quince días.
Abenewco 1, la filial operativa de Abengoa, ha obtenido de sus proveedores un nuevo aplazamiento de pago, el cuarto, hasta el 31 de octubre próximo.
El rescate de Abengoa pasa por la entrada de un socio en Abenewco, y la única oferta vinculante que está sobre la mesa es la del fondo estadounidense Terramar Capital por 200 millones (60 en capital y 140 de asunción de deuda), que ha extendido el plazo de su oferta vinculante para hacerse con el 70 % de la compañía sevillana hasta el próximo 15 de junio.
No obstante, la entrada de Terramar está condicionada a la obtención de los 249 millones de rescate de la SEPI, que a su vez activaría el resto de la reestructuración, con un máximo de 300 millones de avales de los bancos para poder acometer proyectos.