Un sorbo frente a la Giralda

Los establecimientos más emblemáticos del Centro abren sus terrazas durante todo el año para comer, merendar o tomar una copa mientras se disfruta de unas vistas privilegiadas. También reservan este espacio para la celebración de eventos particulares

12 mar 2017 / 20:31 h - Actualizado: 12 mar 2017 / 21:09 h.
"Hoteles","Sevilla desde las alturas"
  • EME Catedral dispone de varias terrazas a distinto nivel frente a la seo. En una de ellas incluso se puede cenar a la luz de las velas y con la Giralda como testigo. / Fotos: El Correo
    EME Catedral dispone de varias terrazas a distinto nivel frente a la seo. En una de ellas incluso se puede cenar a la luz de las velas y con la Giralda como testigo. / Fotos: El Correo
  • El hotel Doña María fue el primero en abrir su terraza al público.
    El hotel Doña María fue el primero en abrir su terraza al público.
  • Decenas de personas toman una copa en la terraza del hotel Inglaterra.
    Decenas de personas toman una copa en la terraza del hotel Inglaterra.
  • El hotel Fontecruz Sevilla Seises también cuenta con terraza con vistas a la Catedral.
    El hotel Fontecruz Sevilla Seises también cuenta con terraza con vistas a la Catedral.
  • Desde la azotea del hotel Eurostars Sevilla Boutique hay magníficas vistas a la Catedral.
    Desde la azotea del hotel Eurostars Sevilla Boutique hay magníficas vistas a la Catedral.
  • El hotel Ribera de Triana dispone de una amplia terraza exterior denominada ‘Level 5th’ desde la que se tienen espectaculares vistas del río.
    El hotel Ribera de Triana dispone de una amplia terraza exterior denominada ‘Level 5th’ desde la que se tienen espectaculares vistas del río.

Tomar un aperitivo, un café o una copa teniendo frente por frente las cubiertas de la Catedral y la imponente Giralda no es ninguna fantasía sino una opción viable y además para cualquier persona. Y es que, desde hace unos años para acá, los establecimientos hoteleros más céntricos de la ciudad han visto en sus terrazas una excelente oportunidad de negocio y las han abierto al público general, de manera que el sevillano de a pie –y por supuesto el turista, esté o no alojado en el hotel– puede acceder y disfrutar de una experiencia embriagadora y fruitiva en todos los sentidos.

En estas terrazas-bares en las alturas se puede degustar además una selecta coctelería e incluso hay algunas que se pueden reservar para la celebración de eventos particulares o de empresas.

DOÑA MARÍA

El más antiguo de todos, y que abrió su terraza al público muchos años antes de que irrumpiera esta moda, es el hotel Doña María, ubicado en la calle Don Remondo y con vistas frontales de la Giralda. Desde su inauguración allá por el año 1969 tiene abierta su azotea al público, con un aforo para 110 personas y en un horario de 12 del mediodía a 12 de la noche. Desde Doña María bar se accede directamente, sin interferir con la clientela del hotel a través de un ascensor, a una terraza fantástica que ofrece servicio de cafetería, bar y coctelería –tienen dos cocteleros muy reputados– donde poder tomar un café con un pastel, un sandwich o una copa larga. La edad media del público que sube a la azotea de este establecimiento oscila entre los 25 y los 55 años. El espacio suele acoger eventos de empresas (cócteles), mientras en el bar interior se celebran exposiciones de pintura.

INGLATERRA

Aunque abrió sus puertas al público en el lejano año 1857, el hotel Inglaterra acondicionó su azotea como bar panorámico en mayo de 2012. En estos casi cinco años se ha erigido en uno de los establecimientos que más y mejor provecho ha sacado a su terraza, desde la que se tienen unas vistas espectaculares de la Plaza Nueva, donde se encuentra localizado este hotel de cuatro estrellas, así como de la cercana Catedral y de todo el skyline sevillano.

De acceso público, la terraza abre este mes de marzo de 16.00 a 22.00 horas de domingo a jueves y hasta la medianoche el fin de semana. Conforme se acerca el estío se amplía el horario hasta las dos de la madrugada los viernes y sábados. El aforo de la azotea del hotel Inglaterra es de unas 120 personas y en ella se da servicio de comida y bebida –tiene una gran oferta de coctelería internacional y de gintonics–, y se organiza cualquier tipo de evento o presentación de producto de empresa. Un público de mediana edad suele darse cita en las alturas de este lujoso hotel, donde se celebran igualmente tertulias, conciertos acústicos o catas de productos.

EME CATEDRAL

De vuelta al entorno más inmediato de la Giralda nos encontramos con el selecto hotel EME Catedral en el número 27 de la calle Alemanes, esto es, prácticamente enfrente de la puerta de acceso a la torre campanario. Un establecimiento moderno que fue inaugurado en marzo de 2008 y que desde entonces tiene como uno de sus alicientes más evidentes el acceso a su rooftop. Nada menos que cinco terracitas a diferente nivel que se hallan abiertas al público durante todo el año, a partir del mediodía y hasta las doce de la noche o una de la madrugada, y los fines de semana incluso hasta las tres.

Una de esas cinco azoteas, la que da a Argote de Molina, se utiliza como restaurante sólo en la época estival y exclusivamente para cenas con una decena de mesas. Por lo demás, en las terrazas destacan los cócteles y en particular los mojitos de temporada. Aunque de un aforo un tanto limitado, subir a la azotea del EME Catedral es una experiencia inolvidable que suele disfrutar gente joven y también personas mayores.

FONTECRUZ SEISES

Muy cerca del anterior, en pleno Barrio de Santa Cruz, se ubica el Fontecruz Sevilla Seises, un hotel clásico aunque reformado el pasado año y que se localiza en el número 6 de la calle Segovias. Su terraza mirador lounge con vistas a la Giralda –de la que dista 150 metros– es de acceso universal y abre entre semana (lunes a jueves) de 15.00 a 20.00 horas, mientras que los fines de semana se extiende el horario desde las 13.00 horas hasta el cierre en función de la clientela y hasta las dos de la madrugada como tope. Entre 150 y 180 personas caben en esta amplia azotea que se llama Pura Vida y que tiene servicio de cafetería y bar de copas por las noches, si bien los fines de semana también sirve tapas y algo de picoteo entre las 13.30 y las 17.00 horas.

Los turistas que se alojan en el hotel disfrutan mucho de esta terraza-bar, a la que también accede gente joven (de unos 30 años). Los fines de semana hay conciertos de flamenquito y también se puede reservar para cócteles, celebraciones de boda...

EUROSTARS SEVILLA BOUTIQUE

En el número 41 de la calle Abades, en un antiguo palacio que data del siglo XVI, se halla el hotel antes denominado Fontecruz y que reabrió en abril de 2016 como Eurostars Sevilla Boutique, de acceso para el público general desde el mediodía hasta la medianoche los fines de semana y de 16.00 a 24.00 horas los días de diario, aunque en verano el horario se amplía algo más. Su terraza ofrece el servicio típico de bar y cafetería, si bien también se puede comer en las alturas si así se solicita, pues el restaurante del establecimiento está en la planta baja.

Acude a la terraza del Eurostars Sevilla Boutique un gran número de sevillanos, cuya edad oscila entre los 30 y los 50 años. Además de para tomar un refrigerio, esta azotea se puede reservar asimismo para celebrar eventos particulares de toda índole.

RIBERA DE TRIANA

Cerramos este repaso con el único de esta media docena de establecimientos hoteleros que no se enclava en pleno casco antiguo. Se trata del hotel Ribera de Triana, que abrió sus puertas –con otra denominación– hace 11 años en la misma orilla del Guadalquivir, junto al puente del Cachorro. Una ubicación que le confiere unas vistas sensacionales de todo el río, incluida la Torre del Oro, aunque en lontananza también puede avistarse la Giralda.

Hace unos cuatro años que este hotel remodeló y abrió al público su amplia terraza, que tiene cabida para cerca de 200 personas, cerca de un centenar de ellas en su cafetería-bar. Con el nombre de Level 5th, este espacio abre a las 17.00 horas y hasta que se retiren los clientes, que suele ser en torno a la una o dos de la madrugada los fines de semana y algo más temprano los días de diario. Está cerrada en invierno, pero el resto del año está disponible para eventos como cócteles de empresa o celebraciones de bodas. Suele acudir gente joven y de mediana edad hasta los 65 años, además de los turistas alojados en el hotel.