Una semana de 280 millones

La Semana Santa es un filón económico para la economía de la ciudad. Tanto las cofradías como los sevillanos y las miles de personas que visitan la ciudad para ver las procesiones realizan habitualmente un gasto económico extra que supone una gran fuente de ingresos para la ciudad. Concretamente tras la Semana Santa del pasado el volumen de negocio, según las estimaciones del Ayuntamiento de Sevilla, ascendió a 280 millones de euros. Este dato supone aproximadamente el 1,2 por ciento del Producto Interior Bruto de la ciudad.

Las propias cofradías son las primeras que hacen un gran dispendio de cara a la estación de penitencia dado que deben hacer un gran gasto para poner la cofradía en la calle. Son muchas las que continuamente están renovando o conservando su patrimonio con lo cual deben hacer frente a importantes facturas de orfebres y bordadores, entre otros, además de abonar la cera, bandas de música, etc, que no son más que millones de euros que se mueven en la ciudad aunque algunos proveedores sean de fuera.

Los gastos que afronta una hermandad para su estación de penitencia varían mucho entre una y otra en función del cuerpo de nazarenos, aunque hay algunos como las bandas de música o las flores de los pasos que son similares independientemente del tamaño del cortejo. Ángel Caballero, mayordomo de la hermandad de Las Aguas, explica que de cara a la estación de Penitencia abonan 9.000 euros por las dos bandas de música al tiempo que la juvenil que abre la cofradía es gratuita. Las flores de los dos pasos suponen un gasto de 4.500 euros mientras que la cera, también de los dos pasos, asciende a unos 1.700. Los cirios del cuerpo de nazarenos –medio millar aproximadamente– suponen un desembolso de 2.500 euros mientras que en personal que contratan para la estación de penitencia (aguadores, carro, etc.) el gasto suele ser de unos 400 euros. Por su parte, la empresa de seguridad que se encarga de controlar tanto la entrada como la salida de la cofradía suele presentar una factura de 300 euros. Respecto a los ingresos de Semana Santa, Caballero explicó que fundamentalmente viene de dos vías: la subvención del Consejo de Cofradías y los donativos de la papeleta de sitio. En las Aguas, especificó que «quienes llevan cirio no pagan nada sólo hay que abonar 15 euros por las insignias y 20 por cada vara», aclaró el mayordomo. «De esta forma, los ingresos por las papeletas de sitio suelen ser de unos 1.300 euros».

De la misma forma, el mayordomo de la hermandad de la Resurrección, Rafael García-Tapial, también relató los gastos de su cofradía de cara a la Semana Santa. «Las bandas de música de los dos pasos cuestan 12.500. La cera de los dos asciende a 3.000 euros a los que hay que sumar unos 1.000 de las velas rizadas que lleva la Virgen de la Aurora», explicó el mayordomo García-Tapial antes de precisar la factura de la floristería que se encarga también de los dos pasos: «Depende mucho de las flores pero hablamos de unos 5.000 euros en total». La cerería, además de los pasos, también tiene el gasto importante de los cirios de los nazarenos, que en esta hermandad suele ascender a 2.000 euros. Sobre el personal de apoyo para la estación de penitencia, García-Tapial dijo que entre seguridad, aguadores y apagavelas el gasto suma unos 520 euros. «También hay alguna atención económica que tiene la hermandad con los agentes de la Guardia Civil que nos acompañan así como con las religiosas de los conventos de Sor Ángela y el Espíritu Santo, a las que también hacemos un donativo», aclaró.

La hostelería

Alrededor de las cofradías buena parte de la industria sevillana se activa y vive su temporada alta fundamentalmente la que depende del turismo. En el sector hotelero, la primavera sevilla está catalogada como temporada alta –no así el verano– y los establecimientos suelen presentar en estas fechas sus precios máximos del año y suelen llenar todas sus habitaciones. De la misma oferta, la cada vez más amplia oferta de apartamentos turísticos de la ciudad también vivirá estos días con el cartel de completo y con precios que pueden duplicar los de temporada baja. Echando un vistazo a cualquier de los portales de reservas de hoteles empieza a ser complicado encontrar una habitación en Sevilla para la Semana Santa, una cifra que supone un importante porcentaje de la facturación anual de cada uno de los establecimientos. Si el tiempo acompaña, la ocupación superará el 90 por ciento buena parte de los días y será a partir del Jueves Santo cuando incluso supere la cifra del 95 por ciento.

La hostelería es otro de los sectores que vive su agosto particular durante la Semana Santa sevillana, fundamentalmente los del centro de la ciudad y en aquellos barrios donde sale alguna de las diferentes cofradías. Para estos días, son muchos los establecimientos que hacen contrataciones temporales para poder atender la alta demanda, que habitualmente, es difícil encontrar tanto hueco en una barra como una mesa libre para varios comensales. Si difícil es un hueco una barra, la tarea de tomar un taxi también se vuelve casi misión imposible. En estas fechas tienen las tarifas más elevadas del año y suelen obtener, a base de muchas horas al volante, unos ingresos importantes que contrarrestan las épocas de vacas flacas. Es el agosto hotelero. Es el motor económico de la Semana Santa.

Alrededor de 5.000 euros cobra una banda de música por una estación de penitencia. La gran mayoría toca cada día de la Semana Santa.

El gasto en floristería es uno de los grandes desembolsos que hace la hermandad.

La factura de la cera del cuerpo de nazarenos varía según la hermandad. Las más numerosas pueden negociar mejor precio al comprar más volumen.

Un palco en la plaza de San Francisco para toda la Semana Santa cuesta entre 580 y 790 euros.

La ocupación hotelera durante la Semana Santa suele superar el 90 por ciento.

Los bares, fundamentalmente los del centro de la ciudad, viven su mejor época del año.